La interés que despierta la moda entre las royals de todo el mundo es algo que no sorprende, pero no es tan habitual que hagan como Pauline Ducruet, la hija de Estefanía de Mónaco que tiene su propia firma de lujo. Más allá de acudir a determinados actos oficiales, Pauline parece haber encontrado su objetivo en la moda, aportando no solo su estilo al diseñar, sino también imprimiendo una filosofía de vida en cada prenda que es acorde con los tiempos que corren y que pone la mirada en el futuro de la sociedad. Su proyecto, que cada vez es más aplaudido, se llama “Alter”. ¡Descúbrelo!
Fue en 2108 cuando Pauline Ducruet creó su firma, y ya entonces estaba presente su voluntad de trabajar desde la sostenibilidad, creando ropa de carácter inclusivo. Podríamos hablar de una actitud casi visionaria, con la que la joven royal se proponía que, a través de su ropa, se pudiera sentir la libertad de ser uno mismo. ¿La clave? Diseñar sin condicionantes de género que limiten a la hora de expresar lo que cada uno es.
Empieza a ser habitual que determinadas marcas incluyan en sus colecciones prendas unisex, pero no deja de ser algo anecdótico. Y sí, empiezan a surgir algunas marcas que no hacen distinción de género en ninguna de sus propuestas, pero sigue resultando algo novedoso. Por eso sorprende que hace 5 años Pauline Ducruet ya quisiera posicionarse al crear su firma, con la que defiende la libertad de expresión y el amor, fomentando y defendiendo el respeto hacia todas las personas independientemente de su género.
Para ello, diseña prendas que son un fondo de armario impecable, pero con un carácter especial que se mueven entre el lujo y el underground logrando un equilibro sensacional. Cada pieza está diseñada en una única talla para que se adapte a cada persona de manera única y con la idea de que resulte de lo más versátil.
Que la moda sea sostenible es uno de los grandes objetivos a alcanzar por las grandes y pequeñas empresas que se dedican a este sector. Alter ya nace con esa conciencia, por lo que toda su ropa se fabrica en Francia para asegurar la trazabilidad y la transparencia.
Los tejidos proceden de materiales reciclados y los tintes que se utilizan no contienen químicos. Frente a otras marcas que lanzan colecciones cada poco tiempo, incluso semanalmente, Alter solo tiene una colección nueva al año. La idea es que la ropa debe durar, y la calidad de la suya lo permite, para salir del bucle de consumismo que nos lleva a comprar de manera compulsiva.