La reina Margarita ascendió al trono tras la muerte de su padre hace 52 años, pero no ha querido que su hijo mayor tenga que esperar a que ella ya no esté en este mundo para llevar con orgullo la corona de Rey y por eso, el pasado 31 de diciembre, anunciaba que tenía intención de abdicar.
El 14 de enero es el día señalado para ello, como también será el momento en el que el príncipe Federico pase a ser el rey Federico X. Un momento histórico del que cada vez se conocen más detalles, una ceremonia que se espera austera y rápida, pero no por ello menos solemne.
A pesar de dejar el trono el 14 de enero, Margarita seguirá conservando su título de Reina, así como el de Majestad. Se espera que, en reunión con el Consejo de Estado en el castillo de Christiansborg, la Reina firme la declaración de abdicación en la que traslada las responsabilidades y funciones a su hijo, que será reconocido como nuevo Jefe de Estado.
Habrá que esperar una hora (se espera que esto suceda sobre las 15:00) para que Federico sea proclamado monarca desde el balcón del Castillo de Christiansborg, un icónico lugar que ha servido de escenario a numerosos momentos históricos para la familia real danesa. Federico será nombrado Rey y se espera que todos los curiosos que se hayan acercado respondan con nueve hurras ante la proclamación del nuevo Rey, que dará su primer discurso como tal. También se dispararán salvas desde Battery Sixtus en Holmen.
Se han planeado diferentes actos en relación con la proclamación, así como distintas celebraciones que tendrán lugar en los días posteriores. Ese mismo día, un poco más adelante, se trasladarán los estandartes reales desde el Palacio Christian IX, ocupado por la reina Margarita, hasta la residencia real de Federico y Mary de Dinamarca.
Durante su propia proclamación, y como suele ser habitual entre los monarcas daneses, la reina Margarita vistió de luto por la muerte de su padre; esto no va a suceder en la de Federico X gracias a que su madre le ha pasado el relevo en vida. Se espera que Federico lleve, igual que lució su madre, el fajín de seda azul y la estrella de la orden del Elefante.
Tras los actos celebrados el 14 de enero, se espera que al día siguiente la familia real participe en el cambio de trono en el Parlamento danés, seguido de una recepción. El domingo 21, participarán en un servicio religioso en la catedral de Aarhus.
Se espera que sea todo muy diferente al momento en el que la reina Margarita ascendió al trono cuando tenía 31 años. Lo hizo un día después de la muerte de su padre, en un acto que apenas duró cinco minutos en el que el primer ministro anunció "El rey Federico IX ha muerto. Viva Su Majestad la Reina Margarita II", un grito que repitió tres veces y tras el que pidió nueve hurras en honor a la monarca.
Ella pronunció su primer discurso como monarca, su esposo salió al balcón, le besó la mano y juntos saludaron al pueblo, tras lo que se desplazaron hasta su residencia oficial, donde de nuevo salieron al balcón a saludar, esta vez en compañía de sus hijos. La ceremonia fue muy parecida a la que se ha planeado para su hijo, aunque también más solemne, puesto que estaban de luto por la muerte del Rey.