Hay quien piensa que el desayuno es la comida más importante del día, la que ayuda a tener la energía suficiente para afrontar la mañana. Cada cual tiene sus gustos, hay quienes apenas pueden tomar nada más que un café y quienes prefieren incluso levantarse un poco antes para poder desayunar como un rey.
Los royal no son una excepción, no hay un menú que compartan todos por ser miembros de la realeza, cada cual tiene sus gustos, manías y costumbres y esto también queda reflejado en ese desayuno que toman.
No es sencillo conocer los detalles que rodean a la realeza, pero en ocasiones podemos atisbar algunas pinceladas de su día a día. Por ejemplo, uno de los chefs de Isabel II compartió que la monarca empezaba el día con un té Earl Grey, sin leche ni azúcar, y unas galletas. Un plato ligero hasta que llegaba la hora del desayuno principal, compuesto por cereales, yogur, tostadas y mermelada (su preferida era la de naranja amarga). También disfrutaba de arenques ahumados, costumbre heredada de los tiempos de guerra.
Su hijo, el actual rey, también parece tener muy claro lo que le gusta. Habitualmente desayuna fruta, pero los fines de semana hace una excepción, optando por tomar cheesy baked eggs, un plato de huevos horneados con espinacas y tomates. Su esposa, la reina Camila, también siente predilección por la proteína que le aportan los huevos y los consume con algún lácteo, para cuidar sus huesos.
Los medios británicos tienen claro que Kate Middleton es amante de las frutas y verduras desde primera hora, por eso los batidos verdes forman parte de su desayuno, en los que suele incorporar kale, espirulina, col rizada, matcha, espinacas, lechuga romana, cilantro y arándanos, una bomba antioxidante.
También busca una alimentación que le ayuda a cuidarse desde dentro la reina Letizia, de quien siempre se ha dicho que sigue la dieta Perricone, por eso no sería raro que optara por uno de los desayunos más habituales y completos, compuesto de huevos, salmón a la plancha, copos de avena, frutos rojos, té verde y agua. Hace tiempo se filtró que el rey Felipe era más tradicional en sus desayunos, optando por unas tostadas y zumo de naranja, pero esto puede haber cambiado con los años.
Leonor, por su parte, tendrá que adaptarse a lo que le ofrezcan en la Academia Militar de Zaragoza, por lo que su desayuno será como el de los demás compañeros, compuesto por café con leche, cacao, zumo, pan con mantequilla y mermelada, aceite, embutidos…
Hace mucho tiempo que Máxima vive en los Países Bajos, por eso no es raro que haya incorporado algunas costumbres, como la de desayunar hagelslag, un plato tradicional que consiste en una tostada untada con mantequilla y con virutas de chocolate. Ella lo personaliza a su manera, poniendo sobre el pan, integral o de centeno, pepino, fruta fresca o mermelada.
Las royals europeas no son las únicas que vigilan su alimentación, Rania de Jordania es también muy cuidadosa con lo que come y siempre tiene fruta para acompañar su desayuno, siendo las granadas una de sus preferidas. Lo acompaña de pan integral y avena, que proporciona mucha energía.