Victoria de Suecia es la heredera al trono de su país y lo es desde que en 1980 abolieron la ley sálica. Hasta ese momento, el heredero al trono había sido su hermano Carlos Felipe, el único varón; en ese momento, Victoria tenía tres años y su hermano pequeño, uno, la menor de los tres, Magdalena, ni siquiera había nacido (lo haría en 1982).
A pesar del tiempo que ha pasado y de que Victoria se encuentre perfectamente confortable en su papel de heredera, este cambio en el destino de sus hijos no fue del todo bien recibido por el rey, Carlos Gustavo, quien hace poco defendía que esto había sido un “error” y una “injusticia” para su hijo.
“Tener leyes que funcionan de forma retroactiva no es muy inteligente, es algo que sigo pensando. Que hubiese afectado a la próxima generación lo habría aceptado, pero mi hijo ya había nacido y de repente un cambio lo dejó sin nada. Es bastante extraño, no puedes hacer eso”, decía en un documental grabado para celebrar sus 50 años en el trono. Unas declaraciones que se entendieron como una falta de apoyo a su hija y que tuvo que aclarar más adelante, sellando ambos la paz con un abrazo.
Una situación un tanto tensa que no sucederá con los siguientes en la línea de sucesión al trono porque, en este caso, está más que claro y así ha sido desde el principio, la heredera será la primogénita, Estelle de Suecia, que en febrero cumplía 12 años. Su hermano pequeño, Oscar, ha cumplido 8 años el dos de marzo.
Victoria de Suecia encontró el amor junto a Daniel Westling, quien fuera su entrenador y con quien se casó en 2010 tras casi una década de relación; junto a él ha creado una bonita familia. Su relación no siempre ha sido sencilla, de hecho al principio costó bastante que el Rey aceptara que su hija se había enamorado de un plebeyo, a pesar de que él también se había casado con alguien sin sangre azul.
Además, un año antes de su enlace, Daniel tuvo que someterse a un trasplante de riñón, donado por su padre, una situación complicada para todos. Con el tiempo, la pareja demostró que son grandes compañeros de vida, Daniel aceptó de buen grado su papel como consorte, cogió la baja de paternidad cuando nacieron sus hijos para cuidar de ellos y parece feliz con sus funciones, principalmente promocionando el deporte y la donación de órganos.
Estelle es la mayor de sus dos hijos y también será la heredera, una joven risueña que siempre que aparece frente a las cámaras lo hace con una sonrisa radiante y cada vez más profesionalidad. Todavía es muy joven para tener funciones dentro de la Casa Real, pero ya ha participado en algunos encuentros y siempre que la familia se ha reunido. Muy centrada en sus estudios, es una apasionada de la moda, seleccionando looks muy modernos y adecuados a su edad, y también del esquí, que practica desde que era pequeña.
Su hermano también es muy aficionado a la naturaleza y con él parece compartir una cercana relación, se muestran muy unidos siempre que se dejan ver en público. Ambos se encuentran en un momento de aprendizaje constante, pero también de diversión. No es raro que se muestren relajados y sonrientes, profesionales, pero con una mirada pícara que parece acentuarse cuando sonríen.