El arte corre por las venas de Elisabeth Thurn Und Taxis, no solo porque pertenezca a una aristocrática familia poseedora de una de las colecciones de arte y antigüedades más importante de Europa, también porque es algo que ha resultado apasionante para ella y no ha dudado en dedicarle su vida en sus diferentes vertientes.
Elisabeth es hija de Gloria von Thurn und Taxis, también conocida como la ‘princesa dinamita’ o ‘princesa punk’, una mujer que revolucionó el mundo de la aristocracia en los años 80 gracias a sus atrevidos estilismos y su amor por el arte. Sin preocuparse demasiado de que fuera 38 años mayor que ella, Gloria se casó con el príncipe Johannes, que fallecía en 1990, haciendo que heredara una gran fortuna.
A pesar de lo que pueda parecer, no fue sencillo para ella conservar los más de 1.500 millones de euros de los que se convirtió en administradora única, para poder pagar la cantidad que se le exigía por el impuesto de sucesiones tuvo que vender gran parte de su colección de muebles, arte y joyas, tal y como recuerdan en Vanity Fair, algo que salvó el legado dejado por su marido.
Un legado del que parece que Elisabeth es también heredera, por lo menos en lo referente a su amor por el arte y, siguiendo los pasos de sus progenitores, ella misma está creando su propia colección de arte. “Crecer rodeada de arte me ha hecho probablemente una coleccionista cautelosa. Soy muy muy cuidadosa. No compro demasiado en realidad porque quiero aprender y comprender primero. Creo que me interesan más las historias que cuentan los artistas que las imágenes en sí mismas. Es su proceso lo que realmente me fascina”, explicó en una entrevista para Sotheby’s recogida por el citado medio.
Elisabeth es la mediana de tres hermanos y se crio en el castillo de San Emmeram, en la localidad Baviera de Regensburg, es precisamente este castillo donde se encuentra la amplia colección de arte que su familia ha ido construyendo a lo largo de la historia. De su infancia guarda bellos recuerdos, “Crecí en el campo, en Alemania, entre bosques y caballos, que es lo que más me gusta", explicó hace años en una entrevista para Hola.
Sus inquietudes por el arte abarcan también la moda, hace tiempo creó una colección de ropa para la firma Àcheval Pampa, una colección cápsula que presentó en la Semana de la Moda de París para esta firma de inspiración ‘gaucha’. Ella misma aseguró conocer bien la estética del campo argentino, que le sirvió de inspiración. “Tenía un novio que tenía un campo en Argentina”, explicó en su momento a Hola. “Salíamos a cabalgar y corríamos al galope hacia el atardecer. Amaba estar allí. La relación terminó, pero mi amor por ese lugar continúa”.
La moda no es su única pasión, también lo son las joyas, algo que le ha llevado a ser curadora (la responsable del cuidado y la presentación de las piezas) de una subasta celebrada en Sotheby’s, y también ha colaborado para Vogue.
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