El pequeño principado de Liechtenstein recibía con ilusión la noticia de la futura boda de María Carolina, quien anunciaba en octubre de 2024, que a lo largo del año siguiente se uniría en matrimonio con su pareja, el venezolano Leopoldo Maduro. Un enlace que promete convertirse en una de las bodas del año, tanto por sus protagonistas como por los invitados que puedan hacer acto de presencia. 

María Carolina, de 28 años, es la princesa más rica de Europa, pero también una de las más discretas, pues tanto su vida como sus relaciones se han mantenido siempre en un segundo plano. Esto no es tan raro si se tiene en cuenta que, tal y como recogen en El Mundo, por tradición, Liechtenstein se rige por unas leyes medievales que impiden que la información real trascienda al pueblo llano. 

Leopoldo es un poco mayor que ella, tiene 34 años, y es el primogénito del multimillonario matrimonio formado por Francisco Maduro y Sofía Vollmer. Su familia paterna está formada por exitosos empresarios, pero su familia materna no se queda atrás y él es heredero de Ron Santa Teresa. 

Es nieta de Hans Adam II, quien hace años decidió dejar de estar en la primera línea y traspasó parte de sus poderes a su hijo Alois, padre de la princesa. María Carolina es la única hija del heredero y regente del trono de Liechtenstein, eso sí, ella está excluida de la línea de sucesión por ser mujer, puesto que en este pequeño país sigue vigente la ley sálica, aunque tampoco lo sería por nacimiento, puesto que tiene un hermano mayor, Joseph, que es el heredero. 

Ella es la segunda de cuatro hermanos, la única mujer y la primera de todos ellos en pasar por el altar. Nació en Grabs, Suiza, y estudió la primaria en Liechtenstein, pero la secundaria la cursó en la International School Rheintal en Suiza, después estuvo interna en Inglaterra. Su pasión por la moda le llevó a continuar con su formación entre París y Nueva York, en la elitista escuela de moda Parsons. 

No aspira al trono de Liechtenstein, pero sí que forma parte de la línea de sucesión de la casa de su madre. Sofía de Baviera es hija del actual heredero de la casa alemana que reinó en Baviera.

La joven parece estar al margen de posibles herencias (a pesar de que para algunos, esa conexión vía materna haría que se le incluyera en un posible trono de Inglaterra y Escocia, tal y como señalan los partidarios de la restauración de la Casa Estuardo), ella vive en Londres junto a su pareja y prometido, dedicada al mundo de la moda, que es para lo que se ha formado académicamente y hacia donde quiere encaminar sus pasos profesionales.

Un trabajo que, en teoría, no tendría por qué necesitar para vivir, puesto que forma parte de una de las familias más ricas de Europa. Medios como Bloomberg y Celebrity Net Worth han calculado la fortuna del príncipe soberano en 9.200 millones de dólares.

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