La monarquía es una de las formas de gobierno más antigua del mundo. Es por eso que las casas reales son las protagonistas de una infinidad de hitos históricos, siendo, en la mayoría de ocasiones, el eje fundamental de cada una de ellas. Podemos decir que, fuera de Europa, la casa real más antigua es la de Japón.
La monarquía en el país nipón se instauró 600 años a.C cuando el emperador Jimmu llegó al trono del país. Este era hijo de Ameterasu, considerado ‘hijo del sol’, y, por tanto, todas las generaciones posteriores tuvieron el estatus de divinidad como hijos del sol descendientes. Eso sí, este estatus de divinidad lo perdió el emperador después de la Segunda Guerra Mundial, cuando el país perdió el conflicto bélico.
Actualmente, la ley de la casa imperial de 1947 establece distintas divisiones. Nos debemos encontrar con el emperador, la viuda del emperador, la gran emperatriz viuda, el príncipe heredero y su consorte, el nieto imperial y su consorte. Así, en la familia real nipona nos encontramos con el emperador Akihito, quien se casó en 1959 con Su Majestad Imperial la emperatriz Michiko.
Akihito es el primer hijo varón, tras sus cinco hermanas mayores, del emperador Showa y de la emperatriz Kojun. A este le sucedió, en mayo de 2019, el emperador Nahurito, quien se convirtió en príncipe heredero cuando su padre ascendió al trono. Naruhito se casó en junio de 1991 con la emperatriz Masako y tienen una hija, la princesa Aiko, quien nació en 2001 y ostenta el título de princesa Toshi.
Japón es muy país con una opinión muy férrea sobre la presencia de las mujeres en la casa real y, por eso, la ley sálica ha obligado a que sea su tío, Fuhimito, quien herede el trono del país. Es por eso que Aiko no será nunca emperatriz de Japón. La fiesta de su 20 cumpleaños fue una de las más especiales del país, a pesar que desde hace años, el país se ha tornado más austero en cuanto a celebraciones reales.
A pesar de la reducción de gastos, la familia real japonesa organizó una celebración pública del cumpleaños de Aiko. La joven está estudiando Literatura Japonesa en la Universidad Gakushuin de Tokio y todas las miradas se centraron en la tiara que iba a llevar Aiko. Este complemento es uno de los más especiales para la familia y fue de su tía Sayako Kuroda, la hermana pequeña del emperador Nahurito y del príncipe heredero Fumihito. Eso sí, Aiko no recibirá una tiara creada exclusivamente para ella, siguiendo con esa idea de reducir gastos.
Otro de los nombres que más han sonado en los últimos tiempos dentro de la casa real nipona es el de Mako. Ella es la sobrina mayor de Naruhito y la hermana mayor del príncipe Hisahito, segundo en el orden de sucesión al trono. Pero, ¿qué ha hecho ella para convertirse en noticia? Mako se enamoró de Kei Komuro, un compañero de la Universidad de Gakushuin en el año 2012. En un principio, su enlace iba a celebrarse en 2018, pero esto fue pospuesto.
La relación entre ambos fue más que cuestionada, ya que Komuro no tiene sangre azul. Finalmente, la boda civil tuvo lugar en octubre de 2021 y, automáticamente, Mako perdió su título y privilegios, pasando a llamarse Mako Komuro. Tras esto, la pareja se ha establecido en Nueva York, donde él se graduó en Derecho y donde ha conseguido un puesto como abogado.
Si hablamos de la casa real europea más antigua debemos hablar de Reino Unido. Así, la monarquía británica es la más antigua de Europa y, entre los años 802 y 839, el rey de Wessex, Egbert, se convirtió oficialmente en el primer rey de la corona británica. No fue hasta principios del siglo XVIII cuando Inglaterra y Escocia se unieron en el reinado inglés que hoy en día conocemos.
La historia de la casa real británica es mucho más conocida que la nipona. Así, Isabel II ostenta el trono desde 2 de junio de 1953. Así, la joven ascendió a la corona tras la repentina muerte de su padre y mientras se encontraba de viaje. Fue en 1947 cuando se casó con Felipe de Edimburgo, quien siempre se mantuvo en la sombra de la reina hasta su muerte en 2021.
La vida de Isabel ha estado marcada por distintos momentos. Uno de los más complicados fue la muerte de Diana de Gales, ex pareja de su hijo Carlos, en un accidente de coche. El matrimonio entre ambos ya había dado mucho que hablar debido a las distintas infidelidades por parte de Carlos, así como por el inconformismo de Diana con su matrimonio. Ambos se acabaron divorciando en unos términos bastante polémicos y Diana concedió una entrevista donde confesó que en su relación no habían sido dos, sino que Camila Parker-Bowles, una ex pareja de Carlos, siempre había estado en su vida.
Otro de los momentos más complicados que ha vivido la casa real británica en los últimos tiempos ha sido la salida del príncipe Harry y Meghan Markle de la vida pública. Así, el hijo pequeño del príncipe Carlos y Lady Di ha decidido desvincularse de la casa real, viviendo una vida totalmente independiente y creando a sus dos hijos, Archie y Lili, en un entorno lo más “normal” posible.