Las royals europeas tienen algo que siempre despierta nuestro interés, y entre todas ellas es innegable que unas nos causan más fascinación que otras. Es el caso de Tessy Antony que, aunque se la podría considerar una ex royal, ostentó el título de princesa de Luxemburgo durante nueve de los doce años que duró su matrimonio con Luis, el tercer hijo de los Grandes Duques de Luxemburgo. La de Tessy es una vida tan fascinante como atípica que no deja de despertar nuestro interés, y aquí te la contamos para que puedas conocerla mejor.
No puede gustarnos más que la realeza europea haya dejado atrás la costumbre de que los royals han de casarse entre sí. Y entre todas las historias de amor surgidas al margen de esta tradición, la de Tessy y Luis de Luxemburgo es una de las más fascinantes.
Tessy proviene de una familia humilde, hija de un alicatador y un ama de casa, que a la edad de 19 años, había alcanzado el rango de suboficial del ejército. Así fue como acabó destinada en Kosovo en 2004, donde conducía vehículos Hummer en una misión de paz coordinada por la OTAN.
Estando allí, Luis de Luxemburgo acudió para una visita oficial y, para sorpresa de todos, el amor surgió entre los dos jóvenes (él tenía entonces 18 años). Poco después anunciaron que esperaban un hijo, el primero de los dos que tendrían, y a los siete meses de sus nacimiento se celebró la gran boda, el 29 de septiembre de 2006 en la iglesia parroquial en Gilsdorf.
Que la realeza europea no siga aferrada a ciertas tradiciones no significa que esté abierta a que sus miembros se casen con quien quieran sin más. La boda entre Tessy y Luis no estuvo exenta de polémica, aunque ella no tardó en ganarse el cariño de todos gracias a su simpatía y espontaneidad. El príncipe renunció a sus derechos de sucesión, a los de su hijo Gabriel, y a los de todos los hijos que la pareja pudieran tener. Con todo, mantuvo el título de Príncipe de Luxemburgo y el correspondiente tratamiento de Alteza Real.
En cambio, a Tessy y a su hijo solo se les concedió llevar el apellido de la familia Nassau. Pero en 2009, tras un decreto expedido el día de la fiesta nacional, se le concedió el título de princesa de Luxemburgo y princesa de Borbón-Parma. A sus hijos (los dos que finalmente tuvieron), además, se les concedieron los títulos de príncipes de Nassau.
A pesar de que en público siempre habían declarado el amor que sentían el uno por el otro, y lo felices que eran como pareja, a principios de 2017 Tessy y Luis anunciaron su separación. Pero conseguir el divorcio no fue tan sencillo, y ambos mantuvieron un litigio tan doloroso como polémico, que duró varios años. Hubo que esperar hasta el 4 de abril de 2019 para que se pronunciara el divorcio. A partir de ese momento, según un comunicado de la Casa Gran Ducal de Luxemburgo, Tessy dejaba de ser princesa, pasando a llamarse "la señora Tessy Antony-de Nassau". Con todo, esta decisión no se hizo efectiva hasta septiembre de ese mismo año, y en los meses que transcurrieron hasta entonces pudo ostentar el título de princesa.
Tras el divorcio, ambos han rehecho sus vidas sentimentales. La relación entre los dos parece haber mejorado mucho tras el divorcio, y las muestras de afecto y respeto entre ambos son ejemplares como ex pareja que son. Sin embargo, con los padres de Luis, los Grandes Duques, parece seguir habiendo tensiones, y Tessy no ha dudado en manifestar públicamente el rechazo que sienten por ella sus ex suegros.
En cuanto al amor, Tessy conoció al poco de divorciarse a Frank Floessel, un ingeniero con el que decidió volver a pasar por el altar tras un año y medio de relación. La boda, de carácter íntimo a causa de la pandemia, se celebró el pasado 23 de julio en Zúrich. Tessy nos conquistó, una vez más, con su alegría y luciendo un avanzado estado de embarazo, convirtiéndose en una novia muy especial. Solo un mes después nacía Theodor, el primer hijo de la pareja y el tercero para Tessy, que no se puede mostrar más feliz en este dulce momento de su vida.
Actualmente reside en Londres y, además de estar disfrutando de la nueva familia que está formando, Tessy es embajadora del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/sida (ONUSIDA).