Las setas son uno de los productos que más consumimos cuando llega la temporada de otoño. Esto se debe a que la variedad existente nos proporciona una infinidad de posibilidades a la hora de cocinarlas, pero para sacarles el mayor partido hay algo muy importante: su correcta conservación.
Se trata de un producto bastante delicado, por lo que requerirán una atención especial para que no se estropeen. Si queremos conservarlas durante más tiempo en casa habrá que seguir una serie de sencillos consejos.
Lo primero que debes saber es que las setas se pueden conservar de distintas maneras. Así, puede ser que queramos conservar las setas frescas, estas se guardarán en la nevera durante unos días. Para que duren el mayor tiempo posible habrá que hacerlo de una determinada manera.
Debes saber que no hace falta lavarlas, sino que será mejor que las almacenes con tierra. Luego, deberás colocarlos con las láminas hacia abajo en un recipiente y taparlas con un trapo húmedo. Así, se conservarán durante más tiempo en la nevera, aunque habrá que consumirlas lo antes posible.
Otra forma de conservarlas será deshidratándolas. Para ello, lo primero que habrá que hacer será limpiar las setas, sin agua. Luego, podrás deshidratarlas al aire libre, ya sea a través de un rejilla o atravesándolas con un hilo. También, podrá hacerse al sol, aunque sí que es cierto que te podrás encontrar con algunos bichos que podrán molestarte.
Para deshidratarlas en el horno habrá usar una temperatura baja y con un horno eléctrico. Una vez que quieras consumirlas habrá que hidratarlas para que vuelvan a gozar de su jugosidad.
Otra buena alternativa será congelar las setas. Para ello, lo primero que habrá que hacer será limpiarlas y, luego, escaldarlas en agua hirviendo o freírlas a baja temperatura. Luego, habrá que escurrirlas, secarlas en un paño e introducirlas en una bolsa de congelado. Así, en el congelador, se podrán mantener hasta seis meses.
Una opción muy usada, ya que nos permite consumirlas al instante y es el método con el que más tiempo aguantarán (de tres a doce meses), será conservar las setas en un bote de cristal. Lo primero que habrá que hacer será esterilizar un tarro o frasco y limpiar muy bien las setas. Una vez listo este paso, habrá que decidir de qué forma las vamos a conservar: en su jugo, en aceite, en vinagre, en sal o en salmuera. En todos los casos podremos cocinar las setas enteras o en trocitos.