Cómo limpiar una férula dental en profundidad: la importancia de conservarla adecuadamente

Cada vez es más común el uso de la férula dental. Se trata de un dispositivo de plástico o de resina que nos ayudará a relajar la mandíbula durante la noche. Por eso, será de mucha ayuda para aquellas personas que aprietan la boca y que sienten gran presión en la zona. Pero eso sí, será esencial saber cómo cuidar correctamente de la férula. 

La férula de descarga se encajará perfectamente en los dientes

Como ya hemos comentado, la férula de descarga deberá ser personalizada, porque se va adecuando a la boca de cada uno. Para su diseño, el cliente acudirá a una clínica dental donde se harán unos moldes de su dentadura. Así, la férula encajará perfectamente en los dientes, de color transparente y que será muy resistente. 

Si no se cuida correctamente se puede deteriorar por la humedad

Eso sí, a pesar de todo, este accesorio podrá deteriorarse debido a la humedad de la boca. Por eso, será necesario limpiarla correctamente. Sí que es cierto que existen unos cepillos especiales para la limpieza de las prótesis dentales. Para ello, será importante que la limpiemos profundamente de una forma fácil y cómoda, accediendo a todas las partes de la férula. Esto se tendrá que realizar después de cada uso, complementándolo con la aplicación de una pastilla, vendidas en Farmacia, que sirven para dentaduras postizas. 

Pero, ¿cómo podremos limpiarla?

Aún así, será importante mantener su limpieza durante el paso del tiempo. Para ello, deberemos guardar la férula en el lugar lo más seco posible. Por eso, será importante que lo hagamos en su propia caja. Pero eso sí, después de haberla limpiado y secado con una servilleta, con la que retiraremos el exceso de humedad.

También, antes de colocártela, será esencial que te hayas lavado los dientes antes. Además, será aconsejable que utilices una seda dental para asegurarte que has eliminado todos los alimentos y las bacterias. De la misma forma, será aconsejable manejar la férula con las manos limpias, humedeciéndola para que se pegue correctamente a los dientes y, sobre todo, al paladar. Eso sí, una vez que la colocas en algún lugar, este deberá ser fresco y sin calor. Por eso, no deberás lavarlo con agua caliente ni dejarlo en un lugar donde de directamente el sol.