Han pasado más de tres décadas desde que Niña Pastori arrancó con su carrera musical. Desde entonces, no ha dejado de cosechar un éxito tras otro, aunque sin ninguna duda, su mayor logro ha sido el de encontrar un amor puro con el que compartir su vida y formar una preciosa familia. Se casó con el compositor Julio Jiménez, 'Chaboli', hace más de veinte años, y a su lado, la cantante ha criado a sus dos tesoros: Pastora y María.
La familia al completo vive en el Cádiz natal de la artista, concretamente en el Puerto de Santa María, donde una impresionante casa rodeada de una gran parcela y con una piscina de ensueño se ha convertido en el refugio de la cantaora.
María, nombre de pila de la artista, vive desde hace un tiempo en un impresionante chalet de varias plantas donde el estilo moderno e industrial se han aunado para crear un espacio mágico. La casa está rodeada de una gran parcela donde los colores blancos son los encargados de dar la bienvenida.
Se trata de un jardín donde la cantante ha logrado mantener la privacidad de su familia rodeando la vivienda con una gran valla, a la par que crear un espacio, íntimo, tranquilo y elegante donde la fachada, los suelos, y el resto de la decoración de colores claros hacen que el espacio sea aún más amplio.
En el epicentro de esta explanada, una gran piscina se ha convertido en la posesión más preciada de la familia, todo ello rodeado de un manto de césped verde perfectamente cuidado donde la cantante no ha dudado en ponerse en forma junto a su entrenador personal.
Desde el amplio jardín se accede directamente a un gran salón en el que Niña Pastori comparte gran parte de su tiempo con los suyos. Se trata de un espacio amplio y diáfano, con los techos muy altos y con gran parte de la pared recubierta de ladrillos y cemento, lo que le da ese aspecto más moderno. Además, las ventanas, las vigas y la de la escalera de que da acceso al resto de la casa son de un metal negro mate que le aporta ese estilo típico industrial y que se contraponen con el suelo de baldosas tipo mármol en color gris claro.
En cuanto a la decoración, Pastori ha escogido un estilo donde la madera y el metal son los principales componentes, sin embargo, lo que más llama la atención de todo este espacio es el gran sofá de terciopelo amarillo mostaza que corona la habitación y que combina a la perfección con las sillas de la gran mesa del comedor.
Los colores llamativos son un gran recurso para hacer de una estancia más sobria un lugar 'chic', y la artista no ha dudado en utilizarla en el resto de su casa, donde también hemos podido ver unas butacas de un cuero color camel u otro sofá del mismo estilo que el anterior pero esta vez en un tono azul turquesa. Además, la gaditana no ha dudado en añadir ese toque floral que tan en tendencia está ahora, llenando su vivienda de plantas y flores que dan un toque aún más acogedor.