Hace poco menos de un mes que Violeta Mangriñán anunció a sus dos millones de seguidores lo que muchos de ellos ya sospechaban: volverá a vivir a Madrid. La familia que ha formado junto a Fabio Colloricchio y su hija Gala abrirá una nueva etapa vital tras varios meses en Valencia, donde construyeron de cero Villa Favioleta, la casa en la que viven actualmente. El hecho de que, por motivos laborales, ambos tengan que estar viajando constantemente a Madrid ha provocado un cambio de planes: regresar a la capital de alquiler y mantener mientras su casa valenciana.
La extronista, que reconocía haberse arrepentido de su mudanza levantina, ha abundado recientemente en los detalles de esta decisión que todavía meditan. En un principio, la pareja se planteaba alquilar en Madrid y dejar su casa de Valencia para las vacaciones o los fines de semana, aunque admitía estar barajando opciones todavía.
Los precios de las viviendas madrileñas han provocado que Fabio y Violeta se decanten finalmente por sacar algún tipo de rendimiento a su actual casa. Su asesor les indició que era "una chorrada" tener una casa vacía casi todo el año, pudiendo sacarle alguna rentabilidad.
Y su destino tendría que ver con alquilarla durante las temporadas en las que no estén. Mangriñán ha desvelado que piensan que Villa Favioleta puede ser de interés para algún futbolista de los equipos de la ciudad. Pero esto genera un problema.
“Los chicos de la inmobiliaria me dijeron que si quería alquilarla para el mercado futbolístico de este año tendría que irme en agosto, a principios, porque han de dejar a los jugadores ya colocados en sus casas para empezar la temporada”, ha relatado en sus stories de Instagram. "Como bien me dijeron, mi casa es un caramelito y la salida de alquiler es rapidísima, pero para ello debía irme a mediados de agosto", ha explicado.
La cercanía de dicha fecha es lo que ha provocado que Mangriñán se muestre indecisa con respecto al futuro. La valenciana ha pedido consejo a sus seguidores para que le ayuden a orientarse respecto de alquilar la casa ya, o mantenerla durante un año y pensar en el alquiler de cara a agosto de 2024 ya.
"Es que creo que, aunque me vaya a Madrid en septiembre, me apetece mantenerla un añito aunque sea para venir algún finde, Navidad, Pascua, Fallas… ¿Lo veis demasiado?", ha consultado a su parroquia de fieles. "Para algunas cosas soy la chica con las cosas más claras del planeta, para otras la más indecisa, no me aguanto", ha bromeado ella misma.