La guía más completa para triunfar como amigo invisible

Una de las actividades navideñas que más éxito tiene año tras año es el amigo invisible. Puede que lo hayas organizado con familiares, amigos o compañeros de trabajo y, en cualquiera de esos casos, que todo salga tal y como deseamos, contentando a todo el mundo, no es fácil. Para triunfar como amigo invisible hay que tener en cuenta algunas claves que son solo para ti, y otras que afectan a todos los participantes. Toma nota y asegúrate de que este siga siendo uno de tus planes preferidos en Navidad. 

El amigo invisible en la oficina

Organizar el amigo invisible entre compañeros de trabajo con los que hay buena relación puede ser divertido. La cosa cambia cuando las jerarquías no coinciden y hay que contentar a un jefe, las cosas como son. Si eres tú quien tiene un cargo directivo, te recomendamos, sin más preámbulos, que evites organizar el amigo invisible.

No participar es una opción

Esto sirve para ti y para cualquier otra persona. Si no te apetece participar este año en el juego del amigo invisible, por los motivos que sean, no debes sentir la obligación de hacerlo. Del mismo modo que puede decidir no hacerlo cualquier otra persona y su decisión debe ser aceptada sin cuestionamientos. 

Establecer un presupuesto

Una vez que está el grupo del amigo invisible formado hay que marcar un presupuesto para el regalo. Así se evitan problemas como que alguien se sienta obligado a gastar más de lo que puede o que haya una desigualdad evidente entre unos regalos y otros. No pasa nada por bajar el presupuesto, porque lo divertido del amigo invisible es la sorpresa y juntarte con gente que aprecias, no recibir un gran regalo. 

Acepta el resultado del sorteo

Las cosas como son, no disfrutamos igual regalando a todo el mundo, y es muy posible que en el sorteo del amigo invisible nos toque alguien que no conocemos bien o que no nos simpatiza mucho. Se trata de un juego y hay que tomarlo como viene, además de que puede ser una oportunidad para descubrir algo bueno de la otra persona si le pones un poco de ganas e imaginación. 

Carta al amigo invisible

Del mismo modo que escribimos una carta a Papá Noel o a los Reyes Magos, es una gran idea escribir cartas al Amigo Invisible que puedan consultar todos los participantes. No es obligatorio que el regalo sea de esa carta, pero puede resultar de gran ayuda, sobre todo cuando estamos faltos de inspiración. Eso sí, es importante poner regalos que se adapten al presupuesto que se ha acordado.

Agradece tu regalo

Puede que tu amigo invisible acierte con tu regalo y sea una grata sorpresa, pero también puede ocurrir todo lo contrario, y si es así, no pasa nada. Se trataba, como te decíamos, de pasar un buen rato, y lo mejor que puedes hacer es ser agradecido y disfrutar del momento. Seguramente el próximo año tengas más suerte.