Carlo Costanzia y Alejandra Rubio esperan su primer hijo en común. Desde que se conoce públicamente la noticia, la pareja no ha dejado de copar los titulares y las páginas de las revistas del corazón, tanto que los jóvenes han decidido hacer las maletas y darse una escapada romántica a las islas Pitiusas. Carlo Costanzia ha dejado su piso en el madrileño y humilde barrio de Vallecas para disfrutar con Alejandra de unos días en pareja. Sigue leyendo para descubrir cómo es el piso en el que vive Carlo Costanzia en Vallecas.
En la primera entrevista que ofreció Carlo Costanzia en televisión, afirmó que sobrevivía gracias a un trabajo normal después de haber tenido distintos problemas con la justicia. "Llego a malas penas a final de mes. Vivo en un barrio obrero donde puedo permitirme pagar un alquiler bajo. Contando los céntimos. Esa es mi realidad", señalaba el hijo de Mar Flores por aquel entonces, y aunque ahora las ofertas de trabajo le lluevan, el joven de 31 años sigue viviendo en su piso ubicado muy cerca del famoso Parque de las Siete Tetas de Vallecas.
La pareja de Alejandra Rubio vive concretamente en la zona vallecana conocida como la Colonia de los Taxistas. Esta zona del barrio fue inaugurada hace más de cuarenta años, sobre los años 80, como cooperativa de los taxistas y se levantó sobre una antigua fábrica de ladrillos. En particular, la casa en la que vive de alquiler Carlo Costanzia es un bajo con acceso directo a la calle ya que es un local comercial reconvertido en vivienda. Esta tendencia es cada vez más común entre los pisos de alquiler de la capital ante la escasez de viviendas y los altos costes de arrendamientos.
Su casa está situada en una de las calles más céntricas del barrio, paralela al cerro del Tío Pío o también conocido como el Parque de las Siete Tetas. Desde las colinas de este inmenso parque que atrae diariamente a cientos de turistas, se puede observar una de las mejores vistas panorámicas de toda la capital, siendo este uno de los mayores atractivos del barrio. Incluso estas vistas, han impactado en artistas tan importantes como Antonio López quien pintó desde allí su obra 'Madrid desde Vallecas'.
Además, parece ser que este lugar es uno de los sitios favoritos para Carlo Costanzia. A menudo, podemos verle por el parque paseando a sus mascotas, desconectando del día a día, haciendo ejercicio y cumpliendo con su rutina de entrenamientos mientras es cazado por los paparazzis, ya que Carlo intenta seguir manteniendo una vida discreta y apenas comparte contenido de su vida privada en sus redes sociales.
Este barrio es un enclave donde se han grabado numerosos anuncios de televisión y ha sido el escenario perfecto para grabar muchas escenas y secuencias de películas de directores tan importantes como Pedro Almodóvar. Sin duda, el mirador con el que cuenta el parque y desde el que se ve toda la ciudad de Madrid, es uno de los sitios más inspiradores que podemos encontrar en la capital, se construyó en la década de los 80 sobre los escombros de un barrio de chabolas y casas bajas formándose siete colonas, que son las que se conocen popularmente como las 'Siete Tetas'.
En concreto, la zona del barrio en la que reside Carlo Costanzia es muy tranquila y está situado a unos siete kilómetros del centro de la capital y de la Puerta del Sol. Su piso está muy cerca de la avenida de la Albufera, que es la arteria comercial más grande de este distrito madrileño. Y aunque fue una colonia fundada por los taxistas, en la actualidad viven todo tipo de vecinos y de distintas nacionalidades. Además, se encuentra muy cerca del estadio del Rayo Vallecano y está al lado del barrio de Moratalaz. En este barrio, se han criado algunos de los rostros más conocidos de la televisión como Cristina Pedroche, donde viven sus padres, y la actriz Cristina Abad.
En cambio, Alejandra Rubio vive actualmente en un piso en una urbanización privada del barrio de Aravaca, al lado de la casa de su madre Terelu Campos y a unos diez kilómetros del centro de la capital. La influencer vive en un precioso piso de estilo moderno con una decoración propia que refleja la personalidad de la colaboradora.