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El colchón de la cama es, posiblemente, uno de los elementos más importantes de nuestra casa. Que sea de buena calidad y mantenerlo en buen estado es esencial para garantizar nuestro descanso diario y, de paso, alargar su vida útil. Pero es inevitable que en ocasiones ocurran pequeños accidentes que lo ensucien y, para eliminarlos sin dejar rastro, debemos saber cómo limpiar y quitar las manchas del colchón.
Te recomendamos que prestes atención a los consejos que te damos a continuación y, además, que tomes nota de algunos hábitos que ayudan a que tu colchón permanezca limpio y en buen estado durante mucho tiempo:
Tomar el desayuno en la cama puede ser un verdadero placer, que en ocasiones termina cuando el café se derrama manchando el colchón. Lo mismo puede ocurrir con una copa de vino o con un refresco, pero si se da el caso, que no cunda el pánico. Es cierto que no son manchas fáciles de eliminar, pero puedes acabar con ellas utilizando bicarbonato.
En primer lugar, pasa un paño húmedo por la mancha para limpiarla todo lo que puedas y, a continuación, utiliza un secador para secar la zona humedecida. Después, espolvorea bicarbonato sobre la mancha y deja que actúe durante 3 horas. Por último, retira el bicarbonato que sobre con una aspiradora.
El sudor acumulado en el colchón con el paso del tiempo puede pasar desapercibido hasta que un día nos encontramos con una desagradable mancha amarillenta. Para eliminarla mezcla una cucharada de amoniaco y tres cucharadas de jabón líquido en un litro de agua. Empapa una esponja con la mezcla y, bien escurrida, frota con suavidad la zona de la mancha.
Son muy habituales cuando hay niños en la casa, aunque un episodio de enuresis nocturna puede producirse en cualquier momento de la vida adulta. Una de las formas más eficaces de eliminarla es realizando una limpieza profunda con una vaporeta, pero si no tienes una, prueba con la siguiente mezcla: 2 partes de bicarbonato, 2 partes de vinagre y 1 parte de detergente. Vierte la mezcla sobre la mancha y, a continuación, cubre con un plástico la zona y deja actuar durante 8 horas. Después, retira el plástico y retira los restos de bicarbonato con una aspiradora.
Una hemorragia nasal nocturna o la menstruación pueden dejar manchas de sangre en tu colchón. Si la mancha se acaba de hacer, utiliza agua oxigenada y deja que sus burbujas hagan efecto. Después, retira los restos con un paño limpio de color blanco. Si la mancha de sangre se ha secado, prepara una mezcla con dos partes de agua fría y una de bicarbonato. Deja actuar durante 30 minutos sobre la mancha, retira con un paño humedecido en agua fría y deja que se seque.