Así es la nueva casa de Violeta Mangriñán: 380 metros construidos, 1000 de parcela y piscina

"Estoy harta de pagar alquileres abusivos en Madrid, para pagarle la hipoteca a otro, teniendo la posibilidad, prefiero pagar la mía". Así ha explicado Violeta Mangriñán su decisión de adquirir una vivienda en Madrid apenas un año después de volver a la capital tras su breve estancia en Valencia, donde hace dos años terminó de construirse una vivienda unifamiliar que pretendía convertir en su hogar definitivo. Las cosas no fueron como esperaba. Los constantes viajes a Madrid por motivos de trabajo la convencieron de que lo mejor era fijar aquí su residencia.

En un preguntas y respuestas con sus seguidores, la creadora de contenido, que hace unos días se sinceraba sobre su situación económica y negaba que se hubiera gastado dos millones de euros en su nueva casa, ha explicado que por el mismo dinero que estaba pagando de alquiler pagará la hipoteca de su nueva casa, un espectacular unifamiliar. "Voy a pagar prácticamente lo mismo por la hipoteca de una casa independiente con jardín y piscina que por el piso en el que estoy ahora de alquiler. Increíble pero cierto", ha dicho Violeta, que ha contado que está previsto que se lo entreguen en marzo o abril del próximo año.

Los nuevos detalles de la casa de Violeta en Madrid

Aunque cuando anunció que se había convertido en propietaria en Madrid ya dejó ver algunos detalles de su futuro hogar, ahora ha dado algunas pinceladas más sobre este espectacular chalet. Según ha contado, la vivienda está dividida en tres plantas, tiene 380 metros cuadrados construidos y 1000 metros cuadrados de parcela, lo que significa que la familia va a tener un gran jardín en el que Gala y Gia van a disfrutar al máximo.

Sin embargo, aunque está emocionada con esta adquisición, ha reconocido que hay algunas cosas en la casa que no le gustan, pero que no ha podido hacer ningún cambio puesto que la obra ya está en marcha. "La casa es de obra nueva y ya está bastante avanzada. Hay cosas que no me gustan o que yo no hubiese hecho así, pero es lo que hay", ha explicado Violeta, que reconoce que lo más incómodo ahora que tienen niñas pequeñas son las escaleras. "Es un fastidio. La casa tiene tres plantas pero la de abajo ellas apenas la usarán y pondremos vallas protectoras", ha contado a sus seguidores, a los que ha confirmado que lleva algo más de un año buscando la casa perfecta para instalarse con su familia.

Una casa solo suya

Además, nuevamente Violeta Mangriñán ha tenido que explicar que ella es la única propietaria de la vivienda, ha insistido en que cada uno tiene su propia economía y gestiona su patrimonio y se ha mostrado de ser al revés no tendría que dar tantas explicaciones al respecto. "Tanto mi casa de Valencia como esta de Madrid son las dos mías. Solo mías. No sé por qué a la gente esto le extraña, seguramente si fuesen de Fabio o las hubiese comprado solo él no sorprendería tanto. Tenemos economías separadas desde que empezamos nuestra relación y así seguirá siendo, incluso si algún día nos llegásemos a casar". 

Además, ha señalado que, aunque de momento Fabio no haya invertido en bienes inmuebles en nuestro país, sí que tiene varias propiedades en Argentina. Unas propiedades que venderá si considera oportuno para comprar aquí. "Él tiene dos pisos en Argentina. Su idea es venderos cuando sea el momento e invertir aquí en España. Si algún día Fabio se compra algo en España seré yo quien se vaya a vivir a su casa", ha asegurado. 

¿Volverá a Valencia?

Ya por último, ha vuelto a recibir una pregunta que ya le han hecho en más de una ocasión. ¿Volverá a Valencia en algún momento? Y Violeta lo ha dejado claro. No cierra la puerta al regreso, pero por el momento pasarán muchos años en la capital. "Nunca se sabe, la vida da muchas vueltas. En principio tiene pinta de que seguiremos en Madrid por muchos años. Mis hijas crecerán aquí e irán al cole aquí. En un futuro lejano ya se verá", ha dicho la creadora de contenido, que ha reconocido que, aunque no se instale allí sí que espera tener una casa para pasar temporadas. "Lo que sí me gustaría es tener una casita en el mar, cerca de mi pueblo o en el pueblo de mi madre para ir de vacaciones. Eso sí, la terreta es casa y siempre está en mi corazón", ha terminado diciendo.