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Tras su sonada ruptura con Alice Campello, Álvaro Morata se instaló en Milán para comenzar su nueva andadura profesional. En aquel momento, justo después de estrenar su casa familia en Madrid, la modelo confesó públicamente que había tomado la decisión de quedarse en España por sus hijos y por disfrutar de la vivienda que construyeron cuando aún eran pareja. Sin embargo, la modelo decidió el pasado mes de noviembre viajar a Milán para que, según ella misma explicó, sus hijos puedan estar cerca de su padre en el día a día.
Además de tener cerca a su familia, que vive en Italia, la modelo italiana cuenta también con amigas en Milán, una manera de sentirse más arropada tras la ruptura. Desde su llegada, Alice nos ha enseñado a través de sus redes sociales cómo está decorando su nueva vivienda y el gran protagonismo que están teniendo sus cuatro hijos en común con el futbolista.
La primera parte que nos enseñó fue el salón, que está decorado en tonos beiges y con un gran sofá a doble cara que llena todo el centro de la estancia. Además de las fotografías de sus hijos, Alice ha decorado la pared con una gran televisión una chimenea de la que disfrutarán las próximas tardes de invierno.
Estas son dos de las estancias que también ha mostrado a través de sus redes sociales. Alice ha enseñado las curiosas camas que ha comprado para sus dos hijos mayores, Alessandro y Leonardo. Se trata de una original cama con forma de coche en color blanco y negro con el colchón encima. La habitación tiene las paredes de color blanco y están decoradas con imágenes de los dos menores en color blanco y negro. La habitación tiene un gran ventanal que parece dar a una pequeña terraza y, en el suelo, entre las dos camas, una alfombra de color blanco.
"He comprado estas camas para los niños para la casa de Milán y me encantan", ha contado ella misma. A través del link que ha compartido en sus redes hemos podido ver que cada cama tiene un precio de 429 euros.
También en estos días ha compartido la habitación de su hija pequeña, que tiene todas las paredes de color rosa, así como los muebles, los cabeceros, el suelo y hasta la propia cama. En el mueble lateral, que también cuenta con tocador, hay elementos decorativos con su inicial y un montón de conejos de peluche. "La habitación de ensueño para Bella", escribía Alice.
En las redes de la marca explican que "cada detalle fue pensado con mucho cariño". "La elección de los colores, la disposición de los muebles, los tejidos y elementos decorativos...todo fue diseñado para crear espacios mágicos para sus pequeños", aseguran.
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