Borja Thyssen y Blanca Cuesta han dado un importante paso al frente después de años enfrentados, y es que por fin se han acercado a Tita Cervera. Así, ya habrían dejado atrás sus diferencias y planearían pasar unas Navidades muy tranquilas en familia. Al menos, así lo ha confirmado la propia baronesa: "Sí, lo celebraremos juntos. Aún no sabemos dónde, seguramente en la estación de esquí suiza Gstaad o puede ser que en Andorra. Es pronto", daba a entender durante su significativo encuentro en los premios BMW.
Mientras que, por su parte, Borja y Blanca han decidido materializar este acercamiento mudándose a Madrid, concretamente a la lujosa urbanización de La Finca, que les permitirá estar más cerca de su madre y también de la recién llegada Isabel Pantoja. Una nueva etapa en su vida que les tiene muy ilusionados, sobre todo por lo que implica para sus cinco hijos: desde Sacha, que tiene 16 años, hasta la pequeña India, que tiene apenas cuatro. "El mayor ha cumplido dieciséis y la pequeña cuatro. Tenemos todas las opciones y no dan problemas. Son muy buenos", señalaban al respecto.
En cuanto a la casa que planea construirse la pareja, poco a poco vamos conociendo más detalles. Según desvelaban en 'TardeAR' , Borja y Blanca ya habrían puesto en marcha las obras de su nuevo hogar. Un proyecto que estaría en manos de un afamado arquitecto, Alberto Martín Caballero (expareja de Lydia Bosch) y constaría de nada menos que nueve habitaciones, un estudio de arte para que Blanca pueda trabajar en sus obras y pintar, además de un despacho para Borja. Mientras que el interiorismo corre a cargo de Lázaro Rosa Violan, explicaban desde el programa. Todo, dentro en espacio de más de 1.000 metros cuadrados y con un valor de nada menos que diez o doce millones de euros.
"La casa va a tener más de 1.000 metros cuadrados. Son nueve habitaciones y va a tener una sala multiusos, una sala para Blanca y un despacho para Borja. Es decir, un casoplón", informaba Tino Torrubiano. Era a finales del año pasado cuando la pareja decidía vender la casa en la que vivían y se mudaban a una más pequeña de alquiler, mientras esperan a que se construya su nueva y espectacular mansión (obras que comenzaron este mismo verano).
De esa forma, la pareja tendrá también como vecina nada menos que a Isabel Pantoja, quien también decidía mudarse a Madrid hace unos meses. En su caso, la tonadillera optaba por alquilar una casa de 1.000 metros cuadrados que cuenta con una sala de cine propia, además de una parcela de 3.000 metros cuadrados y hasta 11 baños, por la que estaría pagando 30.000 euros de alquiler. También la zona sería del agrado de Pantoja, ya que aquí gozaría de mucha privacidad, por lo que estaría encantada con la ubicación.
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