Los abrigos de plumas se han convertido en nuestros mayores aliados, sobre todo en esas temporadas de más frío. Estos suelen hacer de aislante y ayudan a retener el calor propio al contener plumas en su interior. Eso sí, en general, pueden ser especialmente complicados de lavar y de limpiar.
Los abrigos de plumas pueden tener dos orígenes, uno natural y otro sintético. Es por eso que su modo de lavado dependerá de la composición del abrigo y siempre será muy importante echar un vistazo a la etiqueta.
Para lavar el abrigo será muy importante quitar todo aquello que pueda haber en el interior. Además, habrá que cerrar bien las cremalleras y los velcros y darle la vuelta a la chaqueta. No se deberá incluir ninguna otra prenda en la lavadora y se tendrá que utilizar un programa de lavado para prendas delicadas, con un largo aclarado y agua fría. Eso sí, para evitar que las plumas se apelmacen habrá que poner dos o tres pelotas de tenis en la lavadora junto a la prenda.
No habrá que añadir ningún tipo de suavizante, ya que los abrigos de plumas no lo necesitarán. Y el centrifugado será de 400 revoluciones como máximo. De esta forma, lograrás que no se apelmace, que será muy importante.
En el caso de que prefieras no usar lavadora siempre lo podrás hacer a mano. Eso sí, esto requerirá más tiempo y, sobre todo, dedicación. Habrá que llenar un barreño grande con agua fría y, luego, añadir detergente para prendas delicadas. Para aquellas personas que tienen la piel sensible, lo mejor será utilizar guantes de látex.
Para quitar las manchas del abrigo, lo mejor será frotar con movimientos continuos sobre las zonas de la prenda que estén más afectadas. Luego, deberás usar agua fría para enjuagar la chaqueta y hacer suaves compresiones para escurrir la chaqueta. De esta forma, se eliminará la mayor cantidad de agua posible.
El último paso será aprender a secar la chaqueta. Lo mejor será colocar la prenda en un lugar plano y que no esté en contacto directo con el sol. Además, será importante que se agite para distribuir las plumas por todo el interior de la chaqueta. Si quieres secarla en la secadora, lo mejor será incluir unas pelotas de tenis para que las plumas se muevan. Cuando la chaqueta está completamente seca se deberá meter en el armario.
Eso sí, una vez que se ha secado puede ser que te encuentres que las plumas se han apelmazado en un mismo lugar. Para que eso no suceda podrás desapelmazar las plumas con tus propias manos y repartirlas por toda la superficie. Luego, podrás mojar un poco el abrigo y ponerlo en la secadora, de nuevo.