Hollywood puede ser una maquinaria que tritura a sus estrellas. No son pocos los actores que reniegan de vivir en Los Ángeles porque afirman que es una ciudad en la que solo se habla del negocio del cine, lo que puede resultar agotador, y optan por mudarse a la otra costa de Estados Unidos, a Nueva York. Es el camino que siguió Ana de Armas en 2021, después de que se rompiera su relación con Ben Affleck, a quien había conocido un año antes, durante el rodaje de la película 'Aguas profundas'.
Aquel noviazgo fue muy mediático; la pareja era el objetivo preferido de los paparazzi, sobre todo porque el primer matrimonio de Affleck con Jennifer López lo había convertido en un habitual de la prensa rosa estadounidense. El acoso de los fotógrafos fue tal, que la actriz hispano-cubana decidió abandonar Los Ángeles y mudarse a una Nueva York donde puede pasar un poco más desapercibida. Solo aparece en público en eventos de la marca Louis Vuitton, de la que es embajadora, o como parte de la promoción de sus nuevas películas. Así, por ejemplo, se la vio el pasado mes de septiembre en el Festival de Cine de Toronto, adonde acudió a presentar 'Eden', una película de Ron Howard en la que participa junto a Jude Law, Vanessa Kirby, Sydney Sweeney y Daniel Brühl, entre otros, y que está basada en la historia real de una pareja alemana que formó una peculiar comunidad en las Islas Galápagos.
En los últimos días también ha vuelto a estar de actualidad por el lanzamiento del tráiler de 'Ballerina', una cinta de acción dentro del universo de 'John Wick', la saga de películas con Keanu Reeves como un antiguo asesino a sueldo que vuelve al trabajo que también ha tenido una serie en Prime Video sobre la organización que lo adiestró, 'The Continental'. 'Ballerina' no se estrenará hasta el próximo verano y, en ella, Ana de Armas será una asesina entrenada por los rusos que quiere vengarse de los que mataron a su familia. Será, también, un paso más en las habilidades para la acción que mostró en la última película de James Bond, 'Sin tiempo para morir', donde ayudaba a 007 durante una visita a La Habana.
Esa escena llevaba a de Armas de vuelta a sus orígenes, de algún modo, ya que nació y vivió en Cuba hasta los 18 años, cuando se mudó a España para perseguir su sueño de ser actriz. Había llamado la atención del director Manuel Gutiérrez Aragón, que la contrató para 'Una rosa de Francia' junto a Jorge Perugorría, y en el salto a nuestro país consiguió con relativa rapidez un papel protagonista en 'El internado', la serie que la haría famosa y de la que aún conserva amistad con Elena Furiase. Sin embargo, su éxito también la encasilló en papeles de adolescente. Mientras intentaba salir de ese cajón, estuvo casada brevemente con el también actor Marc Clotet y, después, mantuvo una relación con el director David Victori y, ante la sensación de que su carrera en España había tocado techo, se fue a Los Ángeles hablando muy poco inglés y consciente de que tendría que empezar otra vez de cero.
La primera piedra de ese ascenso a la cima que ocupa actualmente fue 'Toc Toc', de 2015, una película de terror con, precisamente, Keanu Reeves que le abrió las puertas a un rosario de pequeños papeles hasta que llegó 'Manos de piedra', biopic del boxeador panameño Robert Durán, y sobre todo 'Blade Runner 2049', secuela tardía del clásico de Ridley Scott que permitió que la viera un público mucho más amplio. Desde ahí, su consolidación definitiva en Hollywood sería 'Puñales por la espalda’, en la que acababa siendo la protagonista dentro de un reparto que incluía a nombres como Daniel Craig, Jaime Lee Curtis, Toni Collette o Chris Evans.
El momento de mayor gloria, hasta ahora, para Ana de Armas es su nominación al Oscar a la mejor actriz por 'Blonde', de 2022, polémica adaptación de la novela de Joyce Carol Oates sobre Marilyn Monroe. La película dio mucho que hablar desde su presentación inicial en el Festival de Venecia y, aunque las críticas fueran poco benévolas, siempre rescataban la interpretación de la actriz. Por aquellas fechas, además, había iniciado una relación con quien es su actual pareja, Paul Boukadakis, presidente de la aplicación de citas Tinder. Ambos viven entre Nueva York y una mansión en el campo en Vermont y apenas hacen vida social. Los veremos juntos en la alfombra roja, probablemente, cuando se estrene ‘Ballerina’.