El pasado mes de octubre, Natalia Sánchez comunicó a través de las redes sociales que, junto a Marc Clotet y sus dos hijos en común, se mudaba a Argentina, tal y como puedes recordar en este vídeo. La decisión, que fue tomada "de un día para otro" está relacionada con su ámbito profesional, ya que los dos actores han recibido una oferta laboral conjunta que les ha obligado a volar hasta allí y coincidir en el set de rodaje.
Desde el primer momento, la actriz adelantó que no sería fácil viajar e instalar para tan poco tiempo a sus dos hijos en Argentina. La intérprete, que tiene menos secuencias que su pareja, haría "un intensivo con los peques" para entretenerles y enseñarles en esta nueva aventura familiar. Para eso pidió ayuda a sus seguidores, que no dudaron en mandarle trucos y consejos para tener a sus hijos activos.
Pero ahora, tres semanas después de poner rumbo a Argentina, Natalia Sánchez ha contado cómo está siendo su vida allí y las complicaciones que ha encontrado por el momento. "Reconozco que, desde que hemos llegado, me está costando muchísimo encontrar momentos para mí", confesaba.
Tal y como ha explicado la actriz, Marc Clotet está "trabajando o estudiando casi todo el día" y actualmente se encuentra grabando en otra ciudad, un viaje que se alargará durante cinco días. Por esta razón, Natalia está más centrada en sus dos hijos, que considera están "más demandantes que nunca". "Pero momentos como este, recién salida de la ducha, después de darme un auto-masaje por todo el cuerpo con mi aceite y los peques correteando por la habitación del hotel, hacen que me sienta en casa por muy lejos que esté de ella", ha contado a través de sus redes sociales.
Una de las cosas que más han notado los menores al llegar a Argentina ha sido el cambio de hora, ya que allí son cinco horas menos que en España. El famoso jet lag ha calado en ellos y, tal y como contaba la actriz hace unos días, a sus hijos "les está costando un poco" adaptarse a eso. Pero Natalia Sánchez ha ingeniado cantidad de juegos y de trucos para tenerles entretenidos en la habitación del hotel, esa que será su casa hasta que regresen a España por Navidad, algo que ya adelantó antes de abandonar su país.