Martín Bianchi, sobre la llegada de Letizia a casa real: "Su abuela dijo que la iban a hacer picadillo, y fue cierto"

La llegada de Letizia Ortiz a la familia real no fue nada fácil. Muchas personas con poder dentro de la institución, la iglesia, la nobleza y los medios de comunicación no querían que una 'periodista divorciada' fuera la nueva reina. Y la intentaron destronar, antes de ponerse la corona, a través de una serie de resistencias y ataques que venían acompañados de "un fuerte olor a machismo y clasismo". Veinte años después, el periodista Martín Bianchi Tasso ha echado la vista atrás para contarnos cómo fueron esos primeros pasos como princesa y cómo se ha asentado a día de hoy en 'Letizia en Vetusta' (Lengua de Trapo). Un libro escrito “para recordar lo que vivimos aportando un punto de vista diferente. De lo que se hizo mal para no intentar repetirlo de nuevo”. 

¿Por qué titular al libro 'Letizia en Vetusta'? 

Como ella es asturiana y parte de la historia del libro ocurre en Oviedo, quería hacer un guiño a 'La Regenta' de Clarín. La idea era extrapolar la Vetusta que pintaba el escritor en el SXIX que era muy machista y clasista a la España de hace 20 años, cuando Letizia Ortiz fue presentada como princesa de Asturias. Es un juego entre esas dos Españas que no creo que haya cambiado tanto a día de hoy. 

Esa España machista y clasista hizo que tuviera que hacer frente a muchos ataques y resistencias

Hubo ciertos sectores de la sociedad, entre los que destacaban la familia real, los medios de comunicación, que tuvieron tratos complicados hacia ella. Por eso en el libro recorrí por todos ellos las reacciones negativas que vivió Letizia. 

Una de esas resistencias, quizá la más fuerte, vino de la familia real

Y dentro de la familia real, la peor vino del rey Juan Carlos, que no esperaba que su hijo fuera a casarse con una periodista divorciada. De hecho, ya se había resistido a sus anteriores noviazgos. Es curioso porque las novias del príncipe no provenían de la nobleza o tenían títulos, pero su padre esperaba que se casara como había hecho él: con una princesa. Les pilló un poco por sorpresa porque Felipe lo hizo todo muy rápido. Lo anunció cuando ya era muy difícil ir hacia atrás porque había tomado la decisión. Así también consiguió que los medios de comunicación no pudieran informar antes de ese noviazgo y, por lo tanto, no poderlo poner en duda como habían hecho con los otros. Hay que recordar que se anunció directamente el compromiso. 

También sufrió resistencias de los cortesanos que criticaban que su sangre no era noble. Cuentas que muchos incluso la adulaban en persona, pero por la espalda hacían lo contrario

Dentro de la nobleza hubo un sector muy duro que no tragó con eso y que estuvo horrorizado con la decisión. Se publicaron un montón de artículos de opinión en los periódicos conservadores reflejando ese disgusto. Esperaban que, como mínimo, se casara con una noble española. Y también es verdad que hubo muchos comentarios y mucha hipocresía como dices: nobles que son muy cortesanos en persona, pero que a la espalda pensaban que Letizia no encaja ahí. 

Y, por supuesto, de la iglesia. Letizia era mujer divorciada y que no era católica

La boda real visibilizó muy bien el doble rasero que tiene la iglesia: por un lado, negaba la comunión a una persona, pero en el caso de Letizia no lo hicieron. Todo eso generó un gran debate, sobre todo con personas que eran católicas y practicantes. La iglesia incluso hizo un informe para evaluar su caso; pero no fue más que un paripé. Fue una cosa demencial que hace 20 años parecía bastante normal pero no sé si hoy se podría repetir.  

Todo esto, como vaticinó su abuela, acabó en que "la hicieron picadillo" a Letizia

Eso lo cuenta su tía. Lo primero que dijo la abuela Menchu fueron esas palabras. Algo que fue muy certero. Pero también ella supo reconstruirse y renovarse. Hasta que 20 años después tiene más seguridad y margen que cuando era princesa. 

No solo a ella, sino también a su familia

Sí, totalmente. Aunque ella era el objetivo de muchos ataques, también era la que más protección tenía. Se mudó de un día para otro al Palacio de la Zarzuela y contaba con seguridad y asesoramiento. Aunque hubiera ataques, iba a estar más protegida. Pero su familia no contaba con nada de eso y tenía que ir a trabajar todos los días. Por eso el libro cierra con la muerte de su hermana Erika, que encarna ese sufrimiento y todo lo que padeció esa familia.  

¿Cuánto acabaron agravando los medios estas dos circunstancias? 

Los medios somos muchas veces cómplices. Mirando atrás, creo que no se haría igual. No sé si se escribiría en ese tono, o si habría editores que dejaran que se publicaran esas piezas. Creo que parte de culpa siempre tenemos: cuando das voz a ciertas opiniones o críticas infundadas o a un comentario machista o clasista, tienes parte de culpa. Al final estás siendo una herramienta para que ciertas opiniones lleguen al gran público. 

Unas críticas y malos comportamientos que no sufrieron ni Iñaki Urdangarin ni Jaime de Marichalar

Eso es curioso. Las infantas, aunque no se casaron con grandes nobles, Jaime de Marichalar es una nobleza menor de Soria, no vivieron todo eso. De ellos siempre se habló más de las cosas positivas que de las negativas. Se les intentó más edulcorar y agrandar su imagen, no como con Letizia. 

Lo curioso es que al final ha sido una pieza clave para la salvación de la familia real

Cuando se anuncia el compromiso había muchas personas que pensaban que Letizia iba a acabar con la monarquía, pero veinte años después, esa periodista divorciada, es de los miembros más populares, del que más se habla, el que mejor conecta con el público, el que se hace viral, etc. Hoy es un capital valiosísimo para la corona. El tiempo ha demostrado que los que no eran tan dignos eran muchos de los que ya estaban dentro, como Iñaki Urdangarin o el rey Juan Carlos. 

¿Cómo crees que vivió Letizia todo esto? 

Como han pasado tantos años, creo que habrá vivido diferentes momentos. Los primeros 10, cuando todavía era princesa, debieron ser para ella una etapa muy difícil porque el rey Juan Carlos representaba todo lo que ella no quería. Los otros diez, ya como reina y con su suegro fuera del país, debieron ser mucho mejor. No he hablado con ella, pero imagino que flipó bastante cuando entró ahí. En ese momento, los medios protegían mucho a la familia real y al poco empezó a salir toda la basura que había. Empezaba a formar parte de una familia en teoría idílica, que en poco tiempo se convirtió en lo contrario. 

Letizia es una persona que le gusta la lectura y que está al tanto de las novedades que se publican. ¿Tienes constancia de que lo haya leído? 

No. Pero es un libro que no está escrito para ella, sino para recordar lo que vivimos aportando un punto de vista diferente. De lo que se hizo mal para no intentar repetirlo de nuevo. No sé si lo ha leído, pero tampoco sé si lo podría decir. 

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