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Las palabras de Hasan atormentan a Ali Kemal. El empresario no puede olvidar lo que le dijo sobre Efe y tras saber que no mentía cuando le dijo que su hijo se escapó porque su madre no le quiere, cree que también puede ser cierto que el niño no sea su hijo. En shock, angustiado y asustado ante la posibilidad que sea cierto lo que le han dicho, Ali Kemal decide hacerle las pruebas de ADN al pequeño.
Después de ser alertada por el gerente del hotel, Asiye se presenta en la habitación en la que se aloja su hijo y en la que está también Akça. Furiosa al creer que entre ellos ha surgido algo, se enfrentará a ambos. "¿Qué haces en una habitación de hotel con un hombre casado? No te preocupabas por Efe, te preocupabas por ella", le dice a Akça ante de enfrentarse a su hijo y reprocharle el acercamiento con la madre biológica del pequeño. Dolida y atormentada por las palabras de Ali Kemal, la joven se marcha del hotel mientras se replantea su futuro.
Mientras, Ali Kemal pone las cartas sobre la mesa a su madre y le insiste en que tan solo Sule es la responsable de lo que está ocurriendo. "Me divorcio porque está atormentando a mi hijos", le dice a su madre, que teme que todo salga a la luz por lo que le advierte que si se está divorciando por estar con Akça la perderá también a ella. Sin embargo, sus amenazas no surten efecto. La decisión está tomada y no hay marcha atrás. "O no me entiendes o te haces la loca. Ya estoy harto de ser un marido, de ser un hermano mayor, estoy harto de ser tu hijo. Me siento perdido. Por vuestra culpa estoy perdido. Vete y dile a Sule que firme los papeles", le dice a Asiye.
Mientras tanto, Sule sigue adelante con su maquiavélico plan y tras filtrar las imágenes de Akça y Ali Kemal entrando en el hotel, se presenta en la nave de Hasan para mostrarle las fotografías para hacerle perder los estribos y que aleje definitivamente a su novia de su marido. "Tienes que mantenerla a raya. Dile que se aleje de él", le dice a Hasan. Sin embargo, su plan no sale como ella espera. Aunque Hasan se va en busca de Akça, cuando ella le explica qué fue lo que pasó decide darle un voto de confianza para mostrarle que ha cambiado.
Ajena a lo que está ocurriendo entre Akça y Hasan, Sule sigue con la segunda fase de su plan y apoyada por Murat da una rueda de prensa para intentar acallar los rumores. Sin embargo, esto tampoco sale como ella desea. Ali Kemal sale en defensa de Akça a la vez que su ira contra su mujer va en aumento. Ya no hay marcha atrás y una información sobre la transferencia de 100.000 liras turcas que ha salido de la cuenta de su mujer le convence de que ella es la responsable de todo lo que está ocurriendo. "Eres la mujer más peligrosa que he conocido jamás. Eres capaz de lo que sea", le dice ante la sorprendida mirada de su hermano.
Su mundo se desmorona y desesperada, Sule se enfrenta a Akça, que no va a permitir que nadie la humille de esa manera. "No hay nada entre nosotros. Ali Kemal me llamó para disculparse y no podía dejarle en ese estado. No sabía qué hacer", le dice a Sule, a la que deja claras sus intenciones. "Muy pronto recuperaré a mi hijo"
La vida de los Karasu está patas arriba y promete seguir complicándose. Akça no está dispuesta a renunciar a su hijo y Sule ha perdido el control después de que su marido la haya pedido el divorcio. ¿Qué pasará a partir de ahora? Si quieres averiguar qué ocurre a partir de ahora, no puedes faltar a tu cita diaria con ellos. De lunes a viernes a las 18:00 horas en Divinity, los nuevos capítulos de 'Él es mi hijo'. ¡No te lo puedes perder!
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