El destino puede hacer que unos años escabrosos a nivel personal concuerden con un periodo de esplendor profesional. De eso da fe Guillermo Bárcenas, el hijo de Rosalía Iglesias y Luis Bárcenas. El apogeo de su banda, Taburete, coincidía con una etapa turbulenta en la que sus progenitores entraron en la cárcel por varios casos de corrupción de la que se beneficiaron. Con todo este contexto, no cabe duda de que el artista tenía mucho de qué hablar en el reencuentro familiar que se ha producido este fin de semana después de cinco años de forzada ausencia.
Con el título “5 años después volvemos a estar todos juntos” y un emoji de un corazón –el cual reflejaba la emoción del momento-, el artista compartía una imagen en un restaurante de la capital junto a sus padres y su novia, Loreto Sesma, en la que aparece pasándole la mano sobre el hombro a su madre mientras enfrente se encuentra su padre junto a su pareja.
El que fuera tesorero del Partido Popular, condenado a más de 30 años de prisión por el caso Gürtel, ya había tenido la oportunidad de salir de la cárcel anteriormente al poder disfrutar de permisos penitenciarios tras haber cumplido ya una cuarta parte de su condena, pero no así su mujer, Rosalía, que hace unos días obtuvo el primero de los dos de cinco días que tendrá tras la concesión de la Audiencia Nacional.
Durante este tiempo, Guillermo ha sido el principal pilar de Luis y Rosalía, que se vieron involucrados durante más de 12 años en un proceso judicial que terminó con una sentencia de años de cárcel. “Me he acostumbrado a vivir así, la cárcel forma parte de mi vida. Es duro, pero soy una persona optimista”, confesaba el cantante en una reciente entrevista con Jesús Vazquez. Y es que, a pesar de la parte negativa a la que se enfrenta a diario, se siente muy afortunado de poder dedicarse a lo que le gusta: “Mi grupo de amigos es el de toda la vida, tengo a mi novia maravillosa”.
Pero no ha sido un camino fácil y se ha tenido que enfrentar a duras críticas desde sus inicios. “Después de tantos años, los insultos de los haters siguen siendo de lo mismo”, afirma el artista. “Cuando nace Taburete mi padre ya estaba en la cárcel, las cuentas paradas y nos hace un préstamo para poder crear el grupo”, recuerda Willy, que replica así a todos aquellos que le tachan de ser un ‘niño de papá’: “Yo me considero muy fuerte pero reconozco que al final afecta un poco, es un ataque masivo. Las críticas a mi trabajo las llevo mejor que las personales".