Paloma, la desconocida hija de Juan José Padilla y Lidia Cabello: 18 años, estudiante de Derecho y amante de la moda

  • Paloma, la hija de Juan José Padillla y Lidia Cabello, acaba de cumplir 18 años

  • La primogénita del matrimonio ha dado su primera entrevista a la revista ¡Hola!

Nada menos que 39 cornadas, la más grave la que le obligó a llevar un parche de por vida, son las que ha sufrido a lo largo de su carrera como torero Juan José Padilla, que se retiró de los ruedos hace ya un lustro. Y todas ellas las ha llevado “lo mejor que ha podido” Lidia Cabello, su mujer. Una relación que comenzó a muy temprana edad para ambos, ya que se conocieron cuando el diestro, que entonces era panadero, tenía tan solo 17 años y ella cuatro menos, y de la que llegaron al mundo dos niños, Paloma y Martín.

La vida de la primera, que acaba de cumplir 18, dos más que su hermano, ha dado un vuelco en los últimos meses al tener que dejar el hogar familiar, en Sanlúcar de Barrameda, para instalarse en Sevilla, donde ha empezado a estudiar la carrera de Derecho.

Amante de la moda, “responsable, simpática, abierta, social” y con una personalidad arrebatadora, la primogénita del diestro ha concedido su primera entrevista a la revista ¡HOLA!, donde ha protagonizado su primer reportaje fotográfico desde la Real Maestranza de Sevilla, plaza de toros en la que tantas veces se ha jugado la vida su padre.

Cuenta en esta charla que lleva “con mucha naturalidad” ser “la hija de una figura del toreo” como es Juan José Padilla, quien se ha encargado de inculcarle valores tan importantes como la igualdad. Con la misma intensidad admira a su madre, con la que guarda un gran parecido físico: “He de decir que somos iguales, hasta nos han llegado a confundir pensando que somos hermanas. Es todo un halago porque, para mí, ella es belleza pura”.

Paloma Padilla se mudó a Sevilla para estudiar Derecho

100 kilómetros le separa de ellos, de sus padres y de su hermano, sus tres grandes pilares, de quienes se ha tenido que distanciar para dar inicio en la capital hispalense a una nueva etapa vital que le permitirá dedicarse a lo que más le gusta.

“La vida de universitaria me parece maravillosa, estoy conociendo a muchísima gente y tengo un grupo fantástico con el que, además de ir a clases, hago muchos planes”, reflexiona Paloma, que admite que lo que “peor” lleva de esta experiencia es “estar fuera de casa”: “Soy una persona muy familiar, mis padres, mi hermano y yo siempre hemos hecho muchos planes juntos, desde viajes hasta ir a comer a restaurantes, y siempre me ha gustado estar con ellos. Extraño mucho el no poder sentirlos cerca de mí”.