Eva Isanta se ha consagrado como una de las actrices más queridas del panorama nacional. Conocida por todos los públicos por dar vida a Maite Figueroa en ‘La que se avecina’, la intérprete ceutí comparte los éxitos que cosecha con su hijo Álex, fruto de la relación de la intérprete con el también actor Rafael Rojas, de quien se divorció en 2015 tras dos décadas juntos.
El joven de 20 años debutó en el mundo de la interpretación junto a su madre en un cortometraje producido por Macarena Gómez. Eva Isanta confesaría tras el rodaje que su hijo “se lo pasó muy bien” y “se comportó como un profesional”. No obstante, aunque algunos medios han informado recientemente que este trabajo marcó el inicio de su carrera profesional, aseverando que querría seguir los pasos de sus padres, Álex no contempla su futuro en esta profesión.
“No es verdad”, desmentía esta información Eva Isanta, que reconoce que le “hace mucha gracia cuando se inventan noticias” de este tipo. “Mi hijo tiene suficiente con ser feliz y con abrirse camino en el mercado laboral cuando termine la carrera y el máster, bastante tiene”, hacía saber a los compañeros de Europa Press, a quienes comentaba que está formándose en lo “que él ha querido”: “Yo elegí lo mío y mis padres casi se mueren del disgusto. Todavía me dicen ‘acaba una carrera, que has empezado dos y no la terminas”.
Pese a que la intérprete trata de blindar la intimidad de su retoño, en algunas ocasiones no ha tenido reparo en hablar de él en público. Lo hizo, por ejemplo, en el programa de Bertín Osborne, donde relató al cantante y presentador las dificultades de compaginar la actuación con su crianza. En otra ocasión comentó que Álex es muy crítico con los papeles de ficción que interpreta, pero que disfruta viéndola en la popular serie que narra las aventuras y desventuras de una peculiar comunidad de vecinos.
Los seguidores de Isanta han puesto cara a su retoño por el contenido que sube la actriz en sus redes sociales. Eva compartía hace un año, concretamente el 1 de mayo, una fotografía de su archivo personal en la que aparecía con él en brazos cuando era tan solo un bebé. La instantánea data del año 2003, cuando Álex llegó al mundo para cambiar las prioridades de sus padres: “Uno de los mayores retos de mi vida … y el mejor”, escribía orgullosa.