La boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva sigue estando en boca de todos y continúa acaparando los titulares de la prensa del corazón patria. Aunque los detalles de la celebración son escasos debido a que los asistentes se vieron obligados a depositar sus teléfonos móviles en taquillas con el objetivo de blindar la esperadísima exclusiva, poco a poco se van descubriendo algunos detalles de cómo se vivió el enlace más esperado del año en el interior de ‘El Rincón’.
Uno de los temas que más está dando que hablar y que se habría hecho palpable durante el citado evento es la supuesta mala relación entre Isabel Preysler y Carolina Molas, las madres de los novios. Se ha especulado que ni siquiera se habrían dirigido el saludo durante la ceremonia, lo cual causó sorpresa entre los asistentes.
En este contexto, la madre del novio ha tomado la iniciativa de aclarar esta situación al atender amablemente a los medios tras poner punto final a este emocionante fin de semana. La madrina del evento hacía saber a los compañeros que la boda fue “bonita y sentida” y que superó todas sus expectativas. Además, mencionó que vio a los recién casados “muy felices” y radiantes como pareja.
En cuanto a las preguntas relacionadas con las especulaciones que apuntan que estuvo “agobiada” a lo largo de la celebración y que hubo una notable tensión entre consuegras, Carolina Molas no reprimía la risa, mostrándose completamente sorprendida. "¿Qué yo estaba agobiada? ¿Quién dice eso?", preguntaba a los reporteros que esperaban su llegada.
La empresaria negaba rotundamente esta información y desmentía que hubiera mal rollo entre ambas familias, asegurando que estuvo conversando con Tamara y sus seres cercanos durante "una hora y pico o una cosa así en la parte privada de las fotos familiares. Ahí estuvimos toda la familia juntos mucho tiempo".
Carolina Molas, que desea estar alejada del foco mediático, también abordó el tema de su elección de no realizar ningún posado para el extenso reportaje de la revista ¡Hola! "Yo no tenía que posar en la exclusiva", puntualizaba desde el interior de su coche. La madre del empresario manifestó a su hijo y nuera que no deseaba formar parte de la cobertura de su boda. Sin embargo, a pocas semanas de la celebración, consciente de las posibles molestias que esto podría generar, accedió a aparecer en el reportaje de forma espontánea, sin requerir poses, en una exclusiva que seguramente continuará generando atención y comentarios.