Han pasado ya tres y año medio desde que Aless Lequio falleciera y Celia, su prima, le sigue teniendo presente cada día de su vida. El vínculo entre ellos iba mucho más allá del de primos. Ellos eran hermanos. El hecho de que se llevaran tan solo cinco meses, la estrecha relación entre sus madres y que ambos fueran hijos únicos propició que se unieran tanto que acabaron convirtiéndose en almas gemelas. "Era mi compañero de todo, de batallas y de vida", decía el pasado mes de mayo Celia.
Basta echar un vistazo a las redes sociales de ambos para comprobar el amor y la admiración que se profesaban y ver que eran inseparables. Juntos vivieron momentos inolvidables. Disfrutaron de la niñez, se divirtieron durante la adolescencia y entraron en la vida adulta. Tenían mucho camino por recorrer juntos. Desgraciadamente, ese camino se truncó con la muerte de Aless de forma prematura en mayo de 2020.
Sin embargo, ese profundo amor que sentía por su primo sigue vivo en el corazón de la sobrina de Ana Obregón. Aunque Aless ya no está, él sigue siendo su guía. En cada paso que da, Celia le tiene presente. Y así lo ha manifestado en su último y emotivo post de Instagram. La joven ha compartido con todos sus seguidores una preciosa imagen de ambos juntos. Un recuerdo de tantos de los que guarda con tanto cariño. Una breve carta acompaña esta imagen que ya habla por sí sola. Celia no ha olvidado ni olvidará a Aless. Su recuerdo la acompaña y se ha convertido en uno de los motores de su vida. "Espero honrar tu memoria de la forma en que vivo y amo. Y espero hacerte sentir orgulloso, incluso si ya no estás aquí para verlo. Siempre estás en mi mente, pero te he echado mucho de menos últimamente", ha escrito Celia junto a la imagen.
2023 ha sido un año de profundos cambios para Celia Vega-Penichet y, aunque siempre ha tratado de mantenerse alejada de los focos, no ha podido evitar convertirse en noticia. El nacimiento de la pequeña Ana Sandra en marzo colocaba a toda la familia en el punto de mira y eso motivó que su boda se convirtiera en noticiable.
Cuando nació la pequeña, Celia estaba planeando su enlace con Julio Jiménez-Blanco, su novio desde hacía años. La fecha elegida por la pareja para darse el 'sí, quiero' era el 25 de agosto. Todo parecía ir viento en popa. Sin embargo, en mayo, apenas tres meses antes de la celebración, Celia y su pareja cancelaban su boda. Una determinación que, según su entorno, había sido fruto de una decisión "madurada".
Celia aseguraba en ese momento estar atravesando un momento complicado, pero estaba convencida de los malos momentos pasarían. Con el apoyo de sus seres queridos ha seguido adelante, se ha volcado en su trabajo y ha tomado una importante decisión. Después de años alejada de la hípica, ha retomado esta afición. Y lo ha hecho con la firme intención de que sea algo más que un hobby. Según apuntan, quiere competir en salto de obstáculos tan pronto como esté preparada para ello.
La llegada de Anita ha colmado de alegría a la familia Obregón. Todos están encantados con la pequeña, que previsiblemente será bautizada la próxima Navidad y que será en la más estricta intimidad. La familia y algunos amigos muy cercanos acompañarán en este día tan especial a Ana, que ya ha elegido a los padrinos de la pequeña. Por un lado, Justin, el amigo íntimo de Aless, será el padrino mientras que Celia ejercerá de madrina en la celebración.
Pero el papel de Celia en la vida de Anita va mucho más allá del de madrina de bautismo. Según ha hecho público la propia Ana Obregón, Celia es la elegida para encargarse de la menor cuando le pase algo a Ana Obregón, que ya ha hecho su testamento para garantizar que el porvenir de la niña. En caso de que algo le ocurriese a Ana, Celia será tendrá la tutela de Anita.