Carmen y Sabina, las hijas de la baronesa Thyssen, están a punto de cumplir la mayoría de edad. Tal y como ha contado la propia Carmen Cervera en más de una ocasión, el nacimiento de aquellas niñas fue para ella "el destino" y le trajeron "mucha felicidad", por eso ahora no está preparada para que abandonen el nido. La adolescencia de las dos menores ha sido "muy buena" y les gusta mucho "salir a bailar", algo que su madre les permite siempre que cumplan con sus responsabilidades.
En una entrevista en el programa de Susanna Griso, la baronesa Thyssen ha contado que quiere que sean "niñas normales" y que Carmen, la que seguirá con su legado, está a punto de ir a la universidad. "Ella es una estudiante, de las mejores alumnas que hay en el colegio", ha contado orgullosa. "Yo creo que sí, seguirá mi legado. Antes de nacer dije que la que naciese primero se llamaría Carmen, la segunda Sabina, como mi abuela. Carmen es como mi madre, tiene más disciplina. Sabina es artista, cuenta historias desde comics maravillosos que hace y te coge cualquier acento de cualquier idioma", ha comentado sobre la personalidad de las mellizas.
Carmen Cervera tiene con sus hijas la confianza suficiente para que le cuenten sus cosas. "Estoy con chicas jóvenes, estoy al día de todo", asegura. También ha hablado de sus nietos, los cinco hijos de Borja Thyssen. "Tengo cinco niños, uno tiene un año menos que Carmen. Está altísimo, guapísimo. Yo a mi hijo lo adoro, y a sus hijos que son mi vida. Me gustan las cosas en paz, ahora estoy en paz", ha confesado.
El pasado mes de octubre, en una entrevista concedida a la revista ¡HOLA!, la baronesa Thyssen habló como nunca del futuro de sus hijas y de los caminos profesionales que van a tomar. Fue entonces cuando pudimos conocer más de Carmen, la hija de tita que seguirá sus pasos. Tal y como contó en aquel momento, su hija Carmen es "una brillante estudiante". En marzo del pasado año estuvo doce días en Nueva York, viajó junto a un grupo de alumnos elegidos de varias escuelas para asistir a un modelo de debate de las Naciones Unidas. "Era la primera vez que salía de viaje sola y ha sido un gran aprendizaje para ella", comentó su madre.
La baronesa contó entonces que su hija estaba "en un proceso de selección con una prestigiosa escuela de negocios española" y era consciente de sus responsabilidades con los negocios familiares y con el mundo del arte en el que ya se estaba implicando. También comentó que ella, como madre, nunca les ha dicho lo que tienen que hacer porque cree que "deben ser ellas mismas quienes elijan". "Sí quisiera que se dedicasen a gestionar los museos que tenemos y Carmen está decidida. En ese sentido, estudiará ADE y Relaciones Internacionales. Ya una colección de arte internacional tiene que llevarse también como una de empresa", explicó Thyssen.