Fabiola Martínez siempre ha dejado claro que sus dos hijos son su gran prioridad. Quedó claro durante su matrimonio de casi dos décadas con Bertín Osborne, junto a quien tuvo a Kike y Carlos. Y ha seguido siendo así desde que la pareja pusiese fin a su relación, hace ya tres años. Tanto en sus entrevistas como en el resto de apariciones públicas, la modelo venezolana resalta a menudo lo tremendamente unida que está a los dos jóvenes, de diecisiete y quince años. Pero si hay un espacio en el que se ejemplifique el fuerte vínculo entre madre e hijos es en las redes sociales de Martínez. Recientemente Fabiola ha mostrado cómo la han recibido sus hijos al llegar a casa.
Los seguidores de la colaboradora de televisión, presidenta de la Fundación Bertín Osborne (que próximamente pasará a recibir el nombre de su hijo mayor, que padece una parálisis cerebral desde su nacimiento), conocen bien cómo es el día a día de la exmujer del artista andaluz y cuál es la realidad familiar. Es habitual que en Instagram muestre escenas de lo más cotidianas y domésticas junto a ambos. También dedicatorias y mensajes de cariño que evidencian lo mucho que quiere a Kike y a Carlitos.
En las últimas horas, esto ha quedado reflejado con una de las últimas publicaciones de la colaboradora en redes sociales. Es donde ha compartido cómo se han sorprendido sus hijos cuando ha llegado a casa tras un día de trabajo. En el texto, Fabiola reconoce llegar a casa "muertecita de grabar", y encontrarse con un recibimiento que, en sus propias palabras, es su "mayor recompensa" y su "mayor premio". El post se ha llenado pronto de mensajes de cariño.
En el vídeo, que puedes ver dando 'play' al comienzo de esta noticia, se puede apreciar cómo Kike y Carlos, nacidos respectivamente en 2007 y 2008, reaccionan a la llegada de su progenitora al domicilio familiar. "¿Dónde está mi niño bello?", exclama Martínez al entrar, mientras se dirige a su primogénito, sentado a la mesa y muy emocionado con su llegada. El benjamín del clan llega a la escena pocos segundos después, y se muestra sorprendido, con la boca abierta, al comprobar el aspecto de su madre tras las grabaciones "Mamá, ¿qué te ha pasado? Pareces una diosa india, superchula", opina Carlos.
Las palabras de la matriarca nos han permitido conocer, en buena medida, cómo son sus dos hijos con Bertín. De su hijo mayor siempre ha dicho que es feliz y que, como sus padres, tiene carácter: recientemente, debido a la adolescencia, le está viendo "más rebelde y reivindicativo", algo que pone contenta a su madre. Kike está escolarizado por primera vez y lleva meses afrontando una nueva etapa vital de preparación para su futuro (será mayor de edad en apenas un año). Sus esfuerzos se centran actualmente en enseñarle otros tipos de comunicación no verbal, un ámbito en el que tiene "mucha limitación".
Por su parte, el hijo pequeño de la expareja también vive la adolescencia. Su madre reconoce que es "bastante más maduro", y que eso ha generado un problema para ella, en tanto siempre le ha visto como un niño al ser su hijo menor. Por este motivo decidió buscar "ayuda profesional" de cara a dar un giro a las relaciones maternofiliales. Según su madre, Carlos tiene muchas cosas de ella debido al tiempo que pasan juntos, y la presencia de su hermano mayor también le influye. "Tiene sensibilidad y empatiza con las personas y con los sentimientos de los demás, y eso me encanta, pero hay que dirigirlo bien", ha explicado Fabiola.