Tres meses han pasado desde que Joaquín Torres, despidiera a un pilar fundamental de su vida: su madre. Desde entonces, el marido de Raúl Prieto ha pasado unos meses complicados en el que tomó la postura, incluso, de alejarse de su pareja para, de esta manera, no hacerle daño. Sin embargo, tanto el arquitecto como el director de programas han seguido juntos pese a las adversidades de la vida. Ahora, tras tomar conciencia de la pérdida de su progenitora, Torres ha concedido una sincera entrevista en donde, además de abordar su nula relación con uno de sus hermanos, ha desvelado lo que su madre le pidió antes de morir. ¡Te lo contamos!
Desde que su madre falleciera, Torres se ha visto inmerso en una batalla por mantener el honor de sus progenitores tras un conflicto con uno de sus hermanos. La muerte de su progenitora ha desatado un grave conflicto en la familia, que en el año 2013 apareció en la tradicional lista de los 100 más ricos de España con una fortuna de 41 millones de euros ¿El motivo? Verez, que fue madre de cinco hijos (uno de ellos murió muy joven) estaba casada con Juan Torres Piñón, el que fue socio de Florentino Pérez en la fundación de la constructora ACS.
Tras la muerte de Joaquina, la familia emitía un comunicado hace unos días a través de Vanitatis en el que explicaban que Joaquín, Mayte y Andrés (tres de los cuatro hermanos) quería comunicar que su hermano Julio Torres Verez, "en virtud de apoderamiento otorgado y la administración de las sociedades familiares, ha actuado bajo una mala praxis en cuanto a gestiones de estas, así como en cuanto a la gestión de las relaciones personales con los miembros de la familia Torres Verez". Todo ello, en palabras de los protagonistas, "ha ocasionado al margen de unas elevadas deudas empresariales un profundo dolor personal".
Tres meses han pasado desde que saliera a la luz este tenso episodio familiar. Ahora, Torres, ha concedido una entrevista en 'Vanitatis' en donde, además de actualizar cómo está resultando este asunto, también ha desvelado cuál fue la última voluntado de su madre, a la que él mismo le pidió que se fuera "tranquila": "Murió con mucho dolor, y en el momento de paz que tuvo me pidió proteger a todos sus nietos y me pidió que intentara recuperar sus cosas, recuperar su patrimonio para poder repartirlo equitativamente entre todos sus otros hijos y nietos. Mamá ya perdió un hijo y nunca se imaginó encontrarse en esta situación. Fue desgarrador para ella; prefería imaginar que su hijo no existía".