Mar Flores ha dicho en más de una ocasión que sus hijos son su gran prioridad. "Están por encima de todo y eso no va a cambiar", reconocía hace unos años a la revista ¡Hola! Uno de ellos, el actor Carlo Costanzia, su primogénito, lleva meses copando titulares, y recientemente hemos sabido que el próximo diciembre convertirá a su madre en abuela por primera vez, algo de lo que ella finalmente ha hablado. Los otros cuatro, a diferencia de su hermano, se mantienen alejados del foco mediático. Son Mauro, Beltrán, Bruno y Darío, todos ellos fruto del matrimonio de la modelo con el empresario Javier Merino. Así ha hablado su progenitora de los planes de futuro que tienen los jóvenes.
Dos han sido los matrimonios de Flores a lo largo de su vida, y de ambos ha tenido descendencia. Del primero, con Carlo Costanzia di Costligliole, con quien protagonizaría después un mediático divorcio, nació el mayor de sus cinco hijos, de treinta y un años, el más famoso con diferencia debido a su vida profesional y las últimas novedades sobre su faceta personal y sentimental. Del segundo, con Merino, nacieron sus cuatro hijos pequeños, de, respectivamente, veinte, dieciocho y trece años (Bruno y Darío son mellizos). Todos ellos, muy unidos a su madre.
Son ya más unas tres décadas y media las que lleva Mar siendo un rostro conocido debido a sus distintas facetas profesionales, como modelo, actriz, presentadora, colaboradora y empresaria. Una pertenencia al mundo del espectáculo que ha derivado en un evidente (y en su caso, mayúsculo) interés por su vida privada. Por ahora, la socialité parecer tener un solo heredero en lo referente a la exposición pública: su primogénito, que ha trabajado en la interpretación, la moda y la música, y ha tenido distintas apariciones televisivas hasta la fecha.
No parece ser el caso, por el momento, de los cuatro hijos de Flores y Merino. Los dos más mayores, Mauro y Beltrán, son ya de hecho mayores de edad, pero se han alejado por completo de los medios: apenas hay fotos ni datos sobre ellos, aunque sí aparecen puntualmente en algunas de las publicaciones de su madre y se sabe que son amantes del deporte. Los pequeños, los mellizos, estudian secundaria y su madre les suele recoger del colegio y hacen una vida doméstica muy familiar. ¿Se plantean seguir los pasos de su madre?
Flores fue preguntada sobre ello hace unas semanas, durante su asistencia a la primera edición de los Premios de la Academia de la Moda 2024, en Madrid. Además de posar en el photocall previo a la gala, la maniquí respondió a algunas de las preguntas de la prensa, la mayoría relacionadas sobre la razón de ser del evento, aunque también aclaró que su hijo Carlo había estado con ella durante su cumpleaños, a diferencia de lo que se había informado en un primer momento.
Una de las reporteras planteó a la de Usera si le gustaría que sus hijos se dedicasen también a la moda, como modelos o diseñadores. Y Mar ha reconocido que su descendencia no parece inclinarse por este camino: "Para mis hijos no, porque no lo llevan en la sangre de esa manera”. Según sus palabras, para formar parte del mundo de la moda se necesita "ser creativo y tener una mente, una cabeza especial”. Y sus retoños están, como ha explicado, más enfocados hacia el negocio y a la empresa. “Pero no prejuicio, sino porque han dirigido sus carreras por ahí", ha querido matizar.