El pasado mes de abril, Penélope Cruz cumplía 50 años en los que se ha labrado una carrera de éxito tanto en España, donde ha protagonizado películas de la mano de Pedro Almodóvar, así como en Hollywood, donde ha llegado a coronarse como ganadora de un Oscar. Sin embargo, a pesar de su relevancia, ha conseguido mantener en un plano más discreto su vida personal, donde es madre de dos hijos junto a su marido, el también actor Javier Bardem. Ahora, ha concedido una entrevista en la que se ha sincerado como nunca sobre su faceta familiar.
Recientemente, la actriz se ha convertido en la invitada del podcast ‘Estás en tu casa’, del youtuber Jordi Sabaté, activista y enfermo de ELA. Ha sido allí donde Penélope ha viajado hasta su infancia, en la cual ha afirmado que le decían que era “una niña difícil” porque siempre estaba “en las nubes”, hasta el punto de que le llamaban 'Antoñita la Fantástica'.
A pesar de lo que los demás opinaban, ha recalcado que durante su adolescencia fue muy sensata con sus estudios, donde comenzó a desarrollar su trayectoria profesional: "Tenía mucho pavo pero era muy responsable y quise compaginar los estudios con el baile. Bailaba clásico, bailé durante 18 años, y compaginaba con el teatro, hacía castings… Viví una crisis de agotamiento. Mi cuerpo y mi mente me dijeron que tenía que parar".
Emocionada, también ha querido hacer un guiño a su padre, que falleció de forma inesperada a los 62 años, y a su madre, que se mantiene a su lado en todas sus decisiones: "Me tuvieron muy jóvenes, tenían 21 años, y toda la vida me he sentido en deuda con ellos porque no vivieron una parte de su juventud. Ellos lo hicieron y nos lo dieron todo aunque no tenían una situación fácil para sacarnos adelante pero nos han inculcado valores muy importantes", se ha sincerado.
La intérprete, que es la mayor de cuatro hermanos - su hermana Mónica, tres años menor que ella; su hermano, de once años menos; y su hermana por parte de padre, que a día de hoy tiene 12 años-, ha contado que su unión "es muy fuerte y es una suerte". Sin embargo, ha dicho que actualmente, hay cosas que la primera de ellas le sigue echando en cara: "Recuerda que yo no era fácil, que le metía miedos, le daba sustos, siempre me quedaba con alguna chuche más... Yo le he pedido perdón pasados los 30", ha desvelado.
Durante la misma charla, Penélope ha recordado los orígenes de su relación con Javier: “Cuando estábamos reunidos en el proceso de preproducción yo ya sabía que íbamos a estar juntos e íbamos a tener una familia”, ha confesado, remontándose así al rodaje de ‘Jamón, Jamón’, largometraje de cuyo reparto formaron parte ambos hace más de tres décadas.
Junto al actor, con quien pasó por el altar en julio de 2010 en una boda celebrada en las Bahamas, ha dado la bienvenida a sus dos hijos: Leo, de 12 años, y Luna, de 10. Sobre ser madre, ha afirmado que es"la revolución más grande que ha experimentado": "Desde que era una niña, hablaba de tener niños. Quería hacerlo pronto. A los veintitantos intenté adoptar sola pero no pudo ser. Era una obsesión para mí", ha confesado.
Sin embargo, sabía que era "una responsabilidad", razón por la que piensa que hizo bien "esperando": "El primero lo tuve con 37, estaba más preparada para vivirlo como lo estoy viviendo y ellos son mi prioridad y marcan el ritmo de trabajo para no separarme de ellos", ha concluido.