Después de 22 años de trayectoria y un palmarés de 40 títulos, Andrés Iniesta se ha retirado del fútbol a los 40 años. Aunque continuará a pie de campo, esta vez como entrenador, el exjugador del FC Barcelona ha colgado las botas este martes en un acto de despedida en el que ha estado arropado por su mujer, Anna Ortiz, y sus cinco hijos, Valeria, Paolo Andrea, Siena, Romeo y Olympia; a quienes no ha dudado en dirigir unas emotivas palabras.
Coincidiendo con el número del dorsal con el que escribió historia en el fútbol español tras marcar el gol que dio la victoria a la Selección en el Mundial de 2010, este 8 de octubre Andrés ha dicho adiós al deporte que le ha llevado desde Barcelona hasta Emiratos Árabes, pasando por Japón. En los destinos anteriores siempre ha contado con la presencia de su familia, que una vez más, ha estado junto al futbolista durante 'El Juego Continúa' celebrado en el America's Cup Experience del Port Vell de la ciudad condal.
Así, a partir de las 11:30 de la mañana, Andrés, Anna y sus hijos han llegado conjuntados y de negro a excepción de la pequeña Olympia, que ha puesto el toque de color con un tutú rosa. Hasta la ubicación se han desplazado también la hermana y los padres del futbolista. Todos ellos, tal y como el último ha explicado, han sido “siempre su motor”: “Mi hermana y mis padres lo han sido todo para mí. Hoy tengo mi maravillosa familia, con Anna y nuestros seis pequeños. Son el motor que mueven todo y dan sentido a lo que hacemos", ha afirmado.
El de Fuentealbilla, entre lágrimas de “emoción y orgullo”, ha continuado haciendo una mención especial a algunos de los miembros del clan, entre ellos, su padre: “Ha sido mi inspiración. Siempre hemos tenido una conexión muy especial desde que tuve tres años. Mi pasión por el fútbol y lo que he hecho en el fútbol se lo debo a él. Muchísimas gracias por todos los consejos, por los silencios y por lo que has significado para mí”, ha dicho sobre su referente en lo personal y lo profesional.
A su madre, aunque “no le gusta que hable de ella”, también ha querido dedicarle un emotivo mensaje: “Quizá no se ha oído tanto como otras personas. Me gustaría agradecerle la madre que ha sido y la madre que es, por todo. Quería hacerlo en este momento, ya lo sabes de sobra, pero quería compartirlo en este momento tan especial y tan bonito. Todo el sacrificio y esfuerzo por mí y por mi hermana, te lo agradeceré siempre”, ha sentenciado.
Para concluir, no ha desaprovechado la oportunidad de declararse a su esposa, con quien pasó por el altar en el año 2012: "Anna, sinceramente, no tengo palabras para describir lo que realmente siento por ti. Quiero decirte que soy un privilegiado por compartir esta vida contigo. Principalmente por la persona que eres, te respeto, te admiro. Hemos formado esta maravillosa familia y eres nuestro espejo y nuestro reflejo. Te agradezco que me aguantes, no siempre todo es tan bonito. Soy el hombre más feliz y no encontraría mujer y madre mejor para nosotros", se ha sincerado.
Tras su conmovedor discurso, sus familiares han accedido al escenario, donde Iniesta se ha fundido en besos y abrazos con uno de sus hijos, Paolo Andrea, antes de fotografiarse con el resto en una imagen para el recuerdo.