Fernando Tejero se ha consolidado como uno de los rostros más reconocidos del panorama nacional como consecuencia de su larga trayectoria en la interpretación. Es por su faceta profesional por lo que, a lo largo de su vida, ha recibido decenas de premios que, en más de una ocasión, le han llevado a agradecer sus logros a sus familiares, entre ellos, uno de los pilares fundamentales en su día a día: su madre.
Es precisamente de esta última de quien, aunque reconoce que no suele hacerlo a través de sus redes sociales, ha presumido en una publicación en la que ha añadido unas emotivas palabras hacia su fiel compañera de vida.
En su perfil de Instagram, Fernando ha incluido una fotografía junto a su madre, a quien ha querido reconocer en estas significativas y familiares fechas: “Mi madre de mi alma. Nunca pongo este tipo de fotos pero mi madre se merece mil homenajes y este es uno mío particular”, ha comenzado escribiendo.
Tras una primera introducción, el actor ha definido a la protagonista de la imagen como una “mujer luchadora, trabajadora, la mejor madre, la mejor esposa, la mejor superviviente y una mujer valiente”, dando así unas pinceladas acerca de la personalidad de Maruja.
Además, el que en más de una ocasión ha confesado que su progenitora no dejó de trabajar por el negocio familiar mientras criaba a seis hijos, ha señalado que "volvería atrás en el tiempo para protegerla, para abrazarla, para haberle dicho que era la mejor y para hacerla sentir como una Diosa” aunque para él no existe ninguna duda de que ya “lo es”.
En el mismo post, Tejero ha afirmado que sus hermanas le “echarán la bronca” por compartir con sus seguidores la instantánea añadida, en la que su referente aparece en “bata y sin arreglar”. Sin embargo, él tiene claro el propósito de lo realizado: “Es así de bella, sin filtros, sin maquillaje. La belleza que emana no necesita de atuendos”, ha sentenciado hacia su “guerrera”.
En una charla con Cayetana Guillén Cuervo en RTVE, el intérprete se sinceró acerca de sus años más tempranos: “Recuerdo mi infancia como una etapa feliz, estuve rodeado de amor y me sentí un niño muy querido”, expresó. Sin embargo, por circunstancias familiares, tuvo que criarse en vez de con sus padres con su tía, que fallecía cuando él tenía solo catorce años.
A pesar de no haber podido vivir algunos momentos familiares en su casa junto a sus hermanos, el de ‘La que se avecina’ agradecía el esfuerzo de sus progenitores, recalcando que le hubiese gustado otra vida para su madre, a quien solo “recordaba trabajando”.
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