Días complicados los que está viviendo Jessica Bueno. La modelo anunció el pasado domingo su ruptura con Luitingo tras aproximadamente un año de relación sentimental, desde que ambos se conociesen durante su paso por 'Gran Hermano VIP 8'. El anuncio de la decisión llegaba vía redes sociales, con la sevillana entre lágrimas y un texto reflexionando sobre lo vivido con el cantante, al que se dirigía en términos cariñosos, asegurando que las "circunstancias" les habían "superado". Con el paso de los días, el ánimo de Bueno parece haber empeorado, a tenor de sus últimos mensajes en redes. Y recientemente ha revelado que perderá temporalmente a dos de sus grandes apoyos, sus hijos pequeños.
El fin de la historia de amor entre los andaluces se ha convertido en una de las noticias de la semana en lo que a la crónica social se refiere, con la prensa muy pendiente de las novedades, intentando desentrañar, además, la intrahistoria de la que ya es una de las rupturas más mediáticas de estas primeras semanas de 2025. Con el paso de los días, tanto ella como él han ido dando algunos detalles con respecto a su separación amorosa.
Así, Luitingo salía a defenderse en un comunicado, también vía Instagram, negando la existencia de terceras personas en su relación y confirmando que la decisión de no seguir juntos había sido de mutuo acuerdo, en sus propias palabras, definiendo lo vivido con Jessica como una "bonita" historia que pedía no ensuciar en medios de comunicación ni redes sociales con críticas y especulaciones. Por su parte, Bueno, que comparaba inicialmente su ruptura con una canción, acababa por romperse en su perfil con una dura publicación lamentando lo sucedido: "A Dios le pido, déjame sola ya de una vez, que no me quedan trozos en mi corazón para reponerlos otra vez", pedía en voz alta.
En las últimas horas hemos podido saber, además, que la maniquí se queda estos días sin un apoyo importante. Ella misma lo ha contado en sus historias de Instagram, revelando a su parroquia de más de trescientos treinta mil seguidores que tiene que despedirse de dos de sus tres hijos. La influencer es madre de Fran, Jota Jr. y Alejandro, fruto, respectivamente de su relación con Kiko Rivera (el primogénito) y de su matrimonio con Jota Peleteiro (los dos pequeños). Sus hijos con el futbolista, en sus propias palabras, se marchan este jueves "de viaje" durante unos días, sin explicar si van a pasar unos días con su padre o cuál puede ser el motivo de este viaje.
"El motor de mi vida", les ha calificado su madre, que ha compartido una tierna imagen con Jota y Alejandro, sonriente y dedicándoles gestos cariñosos. Hace meses que la modelo decidió mudarse con sus tres hijos y su pareja de entonces, Luitingo, a Sevilla, y dejar Bilbao, su último lugar de residencia, en el que había vivido en los últimos años con su exmarido y después de su divorcio. La mudanza fue objeto de controversia judiucial con Peleteiro, aunque finalmente la justicia, como ella misma contó, falló a su favor. En las últimas semanas, el gallego enseñaba en sus redes sociales que había viajado a lka capital andaluza para pasar tiempo con sus dos hijos mayores: el pasado noviembre se convirtió en padre de nuevo de Mansour Malik, su tercer hijo, el primero fruto de su matrimonio con la modelo Ajla Etemovic.
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