"El año 2021 terminó con una alegría para nuestra familia. Estamos muy felices por poder compartir con vosotros que hemos sido padres de un niña glotona, sanísima y hermosa”. Con estas palabras comunicaba Antonio Orozco, a principios de año, el nacimiento de su hija, a la que presentaba con una tierna imagen. La llegada de Antonella dejaba con la boca abierta a su legión de fans, que no tenían constancia de que el catalán tuviese pareja y mucho menos que estaba a la espera de aumentar su familia, ya que el músico es muy discreto con todo lo que sucede en su vida privada.
Para concluir este anuncio, el artista agradecía las muestras de cariño recibidas por todas las personas durante este tiempo y, concretamente, por el “respeto a la intimidad” que han demostrado por su familia. Aunque para prevenir cualquier tipo de comentario negativo sobre la recién nacida, que comparte ojos azules con su hermano Jansu hermanoJan, lo primero que hizo Orozco tras descubrir su segunda paternidad es impedir que los usuarios de esta red social pudiesen comentar la publicación.
Una norma no escrita que ha vuelto a repetir en su último y esperado post. Pese a que en esos dos meses ha ido compartiendo fotografías de sus dos retoños en redes sociales, por el momento no habíamos tenido la oportunidad de ver alguna en la que salieran los tres.
Una escena que se ha hecho de rogar, pero que ya podemos contemplar en su feed de Instagram. Antonella, con un lazo gris y en brazos de Antonio, mira sonriente a cámara, al igual que lo hacen su padre y su hermano. “Que no me despierten nunca”, pedía Orozco, que estaría viviendo uno de sus mejores momentos personales.
Dos semanas después de dar la noticia, el intérprete de ‘Entre sobras y sobras me faltas’ hablaba por primera vez en público de la pequeña en el programa de Nuria Roca. "Antonella, que tiene casi dos meses, es una niña que viene con un pan debajo del brazo, ha sido una alegría, para mí ahora es toda la inspiración, todo lo que uno necesita", se le caía la baba al cantante, que definía su llegada a la familia como "una bendición".
El catalán, que contaba entre risas que llevaba varias noches sin poder dormir por ella, se derretía al aseverar que es “muy buena” y que “se porta bien”. "De momento ahora, como todos los padres, son muchas preocupaciones, muchas preguntas sin respuesta. Mi amigo Javier Tapias, que es un médico estupendo, dice que los niños tendrían que venir con un libro de instrucciones", comentaba el compositor, que aclaraba que hablaba "feliz y orgulloso” de su paternidad.