Cristiano Ronaldo ha pasado el fin de semana en familia. Así lo ha mostrado en sus redes sociales, donde ha posado junto a Georgina Rodríguez y sus cuatro hijos desde el sofá de casa. Una entrañable y divertida estampa en la que una de las pequeñas de la casa, Eva, no puede evitar partirse de risa mientras se fotografía junto a sus padres y hermanos. “La mejor manera de comenzar mi fin de semana”, ha escrito en su Instagram, una frase a la que ella ha respondido con un "no te podemos querer más".
Desde su casa de Turín, el futbolista ha compartido en sus redes sociales cómo comenzó su fin de semana. Rodeado de sus cuatro hijos, Alana Martina, Cristiano Jr., Eva y Mateo, y de su pareja, la familia al completo se ha retratado desde el sofá verde del salón, disfrutando de una tranquila jornada de descanso.
Un posado de seis que, como ya contó Kim Kardashian cuando se fotografió por primera vez junto a sus cuatro hijos, no ha debido ser tarea fácil de realizar. Mientras que el mayor de los cuatro está pendiente de lo que hace su hermano Mateo, Alana Martina, la más pequeña de la familia, posa sobre el regazo de su padre. Pero el momento más divertido viene con Eva, la melliza de Mateo, que aparece riéndose con el chupete en la boca mientras se sujeta uno de sus pies con la mano.
Aunque la mayoría de las publicaciones del Instagram de Cristiano Ronaldo están relacionadas con sus viajes y eventos futbolísticos, el portugués también alterna sus posts con algunos instantes familiares donde comparte tiempo con los suyos. Desde montar a caballo o en bicicleta, incluso jugar al golf, el futbolista ha mostrado en varias ocasiones cómo disfruta de los días libres junto a su novia y sus hijos.
Georgina Rodríguez es la celebrity española con más seguidores en Instagram. Hace tres años que su vida dio un giro radical, cuando comenzó su noviazgo con Cristiano Ronaldo, con el que ha formado una familia numerosa y se ha trasladado a Turín. Primero trabajó como camarera en un pueblo donde, además de compartir piso, aprovechó para ahorrar dinero y conseguir llegar a Madrid con 19 años.
Allí consiguió trabajo como dependienta, pero pronto se trasladó a Inglaterra para aprender inglés. Cuando volvió a Madrid con 22 años consiguió el trabajo que quería en Gucci, donde conoció a Ronaldo. Otro de sus motivaciones, además de la danza, era convertirse en modelo, un sueño que por fin ha hecho realidad.