Hace ocho años, el guardameta Santiago Cañizares y Mayte García se convertían en padres de trillizos. Una paternidad por partida triple por la que llegaron a sus vidas India, Martina y Santi. Este último se convertiría en el “ángel” que guiaría desde el cielo a la familia tras fallecer a los cinco años a causa de una larga enfermedad. Su lucha les hizo cambiar por completo su mentalidad y aprender de este pequeño héroe que les daba grandes lecciones de vida cada día. Hoy, en el tercer aniversario de su muerte, ambos han querido recordarle y rendirle un sentido homenaje en sus redes sociales.
“Tres años sin ti… tres vidas desde entonces. Y las que nos quedan… muñequito hermoso de Dios… Quédate tranquilo, aquí todo en orden”, escribía Cañizares a su hijo este emotivo texto junto a una fotografía en la que aparecen ambos de espaldas a la cámara dados de la mano. Un conmovedor gesto al que se ha unido Mayte, su mujer, subiendo un vídeo en el que recogía algunos de los momentos vividos junto a su pequeño en vida. “Mi luz, mi guía… aunque no te lo creas, sigo aprendiendo de ti cada día”, empezaba con estas palabras a redactar una carta que ha encogido el corazón de sus seguidores.
“Y cuanto más tiempo pasa, aún valoro más, la mayor lección que nadie me supo dar y la más simple: Valorar lo que la vida nos presenta y con quien nos hace tropezar. Ayudar a quienes tienes, pero sobre todo aprender a cuidarlos. Y lo más importante VIVIR y conseguir lo que te propones, y nunca rendirse, NUNCA JAMÁS”, compartía públicamente la principal enseñanza que aprendió de su hijo Santi, de quien se ha despedido recordándole que su familia le extraña en cada momento: “¡Cómo te echo de menos, pequeño! Te quiero”, concluía.
El tablón de comentarios de ambos post se llenaba de comentarios cargados de fuerza y ánimo para la pareja. “Mucho ánimo Santi, un fuerte abrazo para todos”, “Querida familia, ese muñeco precioso va de la mano de todos vosotros. Un abrazo grande” o “En el cielo hay un ángel que os abraza y seguro se enorgullece de su familia” son solo una muestra de los cientos de mensajes reconfortantes que se contemplan en ambos homenajes.
La crudeza de lo vivido no ha privado al matrimonio de conservar una mentalidad positiva. Luchadora por naturaleza, Mayte contaba en una entrevista para la revista Lecturas que cuando el niño falleció en sus brazos tomo la decisión de que la tristeza no invadiera su vida. Iba a luchar por no venirse abajo por su bien y el de sus tres hijas. “Fue algo que nació en mí. Desde el minuto uno que se fue yo salí de la habitación del hospital sonriendo, flotando. Después de toda la rabia contenida, salió de mí decir: ‘No vas a ser una madre depresiva, vas a ser un ejemplo”.
La clave para la mujer del deportista fue entender como un regalo los cinco años que estuvo al lado de su hijo. “Volvería a pasar por ello sin duda. Para mí ha sido un regalo haberlo conocido. Pienso tantas veces en las familias que pierden a sus hijos cuando están embarazadas o recién nacidos… Par mí que Dios me diera la oportunidad de conocerlo y de que fuera mi mayor lección hace que me sita muy afortunada, la verdad”, confesaba en Viva la vida. Una positividad que se “adquiere con el tiempo” y que sigue por el bien de sus tres niñas. “Si algún día ellas pasan algo malo, ojalá se acuerden de su madre, que ante la adversidad estuvo fuete y tirando para delante”, contaba a Look.