Isabel Preysler, la reina de corazones, no siempre ha tenido suerte en el amor. Es más, a lo largo de toda su vida, se ha casado hasta en tres ocasiones y ha salido con un cantante, un ex ministro, un marqués y un Premio Nobel de Literatura. Su vida amorosa ha estado llena de idas y venidas, algo que también le ha sucedido a sus hijos. O por lo menos a Tamara y a Chábeli.
Esta última, María Isabel Iglesias Preysler, más conocida como Chábeli, fue la primogénita del cantante Julio Iglesias e Isabel Preysler. Cuando era muy joven se fue a vivir, junto a sus hermanos, a Miami. En la década de los 90 volvió a España para presentar algunos programas de televisión. Es por eso que, al igual que su madre, se convirtió en parte de la jet set madrileña.
Por eso, su matrimonio con Ricardo Bofill acaparó todas las miradas, sobre todo por lo ‘exprés’ que fue. Ricardo y Chábeli se conocieron en un viaje a Marruecos. El hijo del conocido arquitecto Ricardo Bofill y Chábeli se enamoraron perdidamente y, al poco tiempo, su relación se consolidó. Tanto es así que ambos protagonizaron ‘la boda del año’.
El enlace se celebró el 11 de septiembre de 1993 en el Taller de Arquitectura de Ricardo Bofill, situado en la localidad barcelonesa de San Just Desvern. Por aquel entonces, las polémicas fueron diversas. Una de las más sonadas la protagonizó el alcalde, quien se negó a oficiar la boda. El hombre alegó que no era un lugar sagrado y que, además, no sentía mucha predilección por la madre de la novia.
Finalmente fue el Juez de Paz el encargado de oficiar la ceremonia. Fueron más de cinco mil personas quienes se agolparon a la puerta del taller para conocer un poco más sobre la espectacular boda. Entre los invitados, unas ciento cincuenta personas, se encontraban distintos nombres conocidos. En este gran día, la novia se enfundó un modelo sin mangas de Dafnis sobre una idea de Valentino.
Pese a poder parecerlo, no todo fue tan idílico como parecía. Años después del enlace y el divorcio, Chábeli confesó que su padre intentó convencerla para que cancelara su enlace. “Chábeli, tengo el avión a diez minutos aquí. Nos vamos todos y les dejamos con la boda”, confesó en la entrevista. Su hija decidió no hacerle caso y, finalmente, se celebró la ceremonia.
La cena la sirvió el afamado restaurante, El Bulli, y el menú estaba compuesto por un caviar con mouse de rábanos, ensalada de pichón con alcachofas, suquet de bogavante y pescado de roca con rape. Para el postre sirvieron un sabayonne de fruta de la pasión y frambuesa, además de la tradicional tarta nupcial.
A todo el mundo le sorprendió los tiempos en los que se había celebrado la boda; habían pasado pocos meses desde que se conocieron hasta que, finalmente, se dieron el ‘sí, quiero’. Por eso, a nadie le sorprendió el divorcio un año y medio después del enlace.
Fue a través de la revista Hola!, la publicación de cabecera de su madre, donde anunció que su matrimonio había llegado a su fin. Chábeli comentó que habían tomado la decisión por “incompatibilidad de caracteres”. Además, afirmaba que ella era "muy casera” y Ricardo, “un gran bohemio”. Al poco tiempo, y después de haber aprendido sobre su experiencia, la hija mayor de Isabel y Julio decidió alejarse de los focos.