Bayan Al Masri se encuentra inmersa en el gran reto que supone participar en ‘La isla de las tentaciones’ junto a su novio, Eros Vidal, con el que lleva saliendo durante cuatro años. La pareja se conoció a través de un amigo, y aunque al principio ninguno de los dos tuvo una buena impresión el uno del otro, al final, terminaron gustándose e iniciando una relación.
Pero su historia de amor no empezó con buen pie, cuando estaban conociéndose Eros seguía con su ex y le fue infiel a la mallorquina. Sus continuas deslealtades y mentiras provocaron que tuviesen un parón. Durante esta pausa, ambos conocieron a otras personas, pero finalmente el amor volvió a unirles para enfrentarse a su mayor tentación y darle la oportunidad a Eros de demostrarle a Bayan que realmente puede confiar en él.
Este resumen de su historia de amor fue contado por ellos mismos en la presentación de la octava edición del reality que se graba en la península de Samaná, República Dominicana, en la que también pudimos conocer que Bayan es de Palma de Mallorca. Aunque es a través de su perfil de TikTok, en el que acumula más de ochenta mil seguidores, en el que ha dado a conocer diez datos sobre ella, entre ellos, que es de origen árabe porque sus padres son de Siria, aunque, como hemos mencionado antes, ella nació en una de las islas Gimnesias.
Además de ser creadora de contenido, Bayan es higienista y protésica dental. La participante de ‘La isla de las tentaciones’ sabe cinco idiomas, pero hay una cosa que no domina y es la orientación con el GPS, una debilidad que compensa con su capacidad para hacer cálculos mentales.
Cuando Bayan tenía quince años, participó junto a su hermano Mohamad de 10 años en un campeonato de cálculo mental. Los dos hermanos, junto a su ábaco, consiguieron llegar a la final y subirse al pódium. La actual concursante del reality de Telecinco quiso recordar este momento de su adolescencia a raíz de que una cuenta de TikTok rememorase las entrevistas que concedió durante su participación en dicho concurso, en las que contaba que dedicaba muchas horas practicando múltiples operaciones en casa y que su aliada era la buena memoria fotográfica.
A muchos de los usuarios que se encontraron con el vídeo en sus redes sociales les costó reconocer a Bayan, pues la de Mallorca aparece muy cambiada y sin los retoques estéticos que ella misma ha confesado que se ha realizado, como el retoque de labios al que se ha sometido hasta en tres ocasiones y a una operación de pecho.
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