Rafa Nadal no solamente es el mejor tenista de nuestro país, y del mundo, sino que también es una de las personas con más dinero en el mundo del deporte. Es por eso que no escatima en gastos; ni a la hora de darse el ‘sí, quiero’ con la mujer de su vida, ni tampoco cuando decide descansar y viajar.
El deportista está muy orgulloso de su tierra, Mallorca, y por eso reside ahí y pasa la mayoría de meses de verano en una de las islas. Para disfrutar más de esos meses de calor, Rafa ha decidido comprarse un impresionante yate. Hace un tiempo decidió poner en venta el anterior, Beethoven, por 2,6 millones de euros. Su deseo era hacerse con un modelo de gama superior, que hoy en día es considerado como ‘el mejor del mundo’, según la revista americana, Robb Report.
El nuevo barco de Nadal, 80 Sunreef Great White, que debe su nombre al tiburón blanco, es uno de los yates más exclusivos y lujosos del planeta. Ha sido fabricado especialmente para el mallorquín por la firma polaca Sunreef Yachts, cuenta con una longitud de unos 24 metros y en su interior caben hasta doce personas, que podrán dormir en las cinco habitaciones que están repartidas por todo el barco. Además, cuatro de ellas están construidas en suite.
La habitación donde duerme Rafa y su mujer, Mery, cuenta con un techo abatible, baño privado, balcón y vestidor. También, cuenta con una impresionante terraza y salón abierto al mar con dos televisiones, con bar y cocina. De la misma forma, en el caso de que el tenista quiera hacer alguna gestión sobre sus negocios, el yate cuenta con un bonito despacho y una zona con escritorio. En la cubierta se encuentra una piscina de hidromasaje y una barbacoa, para compartir más de un momento con amigos.
Otro de los elementos más especiales que conforman la impresionante vivienda acuática de Rafa son las lanchas y las motos de agua con las que cuenta. También, tiene una plataforma de natación hidráulica y un lugar para que descanse la tripulación que decida viajar en el barco. Lo cierto es que el yate no tiene un coste bajo, Rafa ha tenido que pagar casi seis millones de euros por adquirirlo.