La alfombra roja de los Oscar es sinónimo de espectáculo, glamour y alta costura, un momento y un lugar que, a veces para bien y otras para mal, las estrellas buscan deslumbrar con sus looks.
A lo largo de su historia hay celebridades que se han ganado un lugar en la lista de las mejor vestidas; otras muchas son recordadas como las que lucieron los perores estilismos de los Oscar y hay una tercera categoría, ni positiva, ni negativa, que incluye los looks más extremos de la historia de las galas de los Oscar. Son estilismos que están al límite, que despuntan sobre los demás cualquiera que sea la razón que los hace diferentes.
Para recoger su Oscar por ‘Funny Girl’, Barbra Streisand eligió un dos piezas de Arnold Scaasi compuesto por una blusa y un pantalón completamente transparentes bajo los focos de los flashes.
Uno de los looks más extremos lo lució Cher para entregar el Oscar a Don Ameche por ‘Cocoon’, un estilismo creado por su amigo Bob Mackie protagonizado por unas abdominales de acero y un tocado de plumas XL.
Este look en forma de cisne creado para Björk por Marjan Pejoski es el extremo en sí mismo, un imprescindible en cualquier lista de looks inolvidables de la gala de los Oscar.
Hillary Swank llegaba a los Oscar como una de las favoritas a recoger la estatuilla por su actuación en ‘Million Dollar Baby’ y deslumbraba en la alfombra roja con un diseño de Guy Laroche que llamó la atención por el extremo escote de su espalda.
Charlize Theron suele encabezar las listas de las mujeres mejor vestidas en la alfombra roja de los Oscar, pero en 2006, a pesar de su John Galliano para Dior, el excesivo cardado de su pelo le jugó una mala pasada.
Todo lo contrario ocurre con Helena Bonham Carter, que suele estar desacertada en sus elecciones y a la vista está que confiar su estilismo de alfombra roja en el diseñador de vestuario Colleen Atwood tampoco mejoró mucho las cosas.
Elsa Pataky acudía a la gala de los Oscar con un vestido verde esmeralda de Elie Saab que no hubiera sido extremo de no ser por su avanzadísimo estado de gestación. Sus gemelos nacieron poco menos de un mes después de pisar la alfombra roja.
Cuando Lady Gaga prefería que hablaran de ella aunque fuera mal, decidió acudir a los Oscar con un perfecto modelo de Alaïa y con unos guantes rojos de piel que recordaban en exceso a los que se usan para fregar.
La actriz Rita Moreno acudía a los Oscar con el mismo vestido, aunque con pequeñas modificaciones, con el que había recogido el Oscar en 1962, es decir, 56 años más tarde.
Cualquiera de los looks de alfombra roja que haya lucido Billy Porter podría estar incluido en la lista de los más extremos, aunque nos hayamos quedado con este de Alexander McQueen firmado por Giles Deacon inspirado en la Cupola Room del palacio de Kensington.
Quien tampoco suele elegir modelos que pasan desapercibidos es la actriz Andra Day, que generó ríos de tinta con un modelo dorado de Vera Wang con exceso de aberturas y escasez de tela.
Kristen Stewart era una de las grandes protagonistas de la noche y decidió saltarse todos los protocolos de la gala apareciendo en la alfombra roja con un look de Chanel compuesto por blazer y microshorts derrochando actitud y seguridad.