El uso de las piedras como aliadas energéticas en el día a día está cada vez más extendido. Cada gema tiene unos beneficios y propiedades específicas, por lo que conocerlas nos puede guiar a la hora de elegir una u otra.
Unas piedras nos ayudarán a encontrar el equilibrio interior, como la amatista; otras como el cuarzo blanco a encontrar claridad o amplificar la energía o a potenciar la autoestima y el amor propio, como es el caso del cuarzo rosa, pero si lo que estás buscando es una piedra de protección, tendrás que hacerte con una turmalina.
La turmalina es la piedra protectora por excelencia, ya que bloquea la energía y las frecuencias negativas propias y ajenas y, a la vez, fomenta una actitud emocional más positiva.
Esta preciada piedra tiene múltiples usos que podemos incorporar a nuestra vida. El primero de todos, y el más sencillo, es llevándola encima, ya sea en forma de joya o en bruto en un bolsillo. De esta forma creará un escudo protector a nuestro alrededor para alejar las energías negativas y limpiarlas. Además, portarla también ayudará a transmutar las energías negativas en positivas.
La turmalina también es una excelente piedra para equilibrar todos los chakras, así como para usarla a la hora de meditar, ya que guía hacia lo más profundo de uno mismo, aumentando la autoconfianza y disminuyendo el miedo. A la hora de relajarnos, sujetarla mientras hacemos ejercicios de respiración potenciará la calma y la tranquilidad.
Cuando hay un dolor localizado en alguna parte del cuerpo, los expertos recomiendan colocarla en la zona a tratar para aliviarlo. También se puede poner en casa, como elemento decorativo, para absorber las malas energías de la estancia donde esté ubicada; al igual que situarla al lado de un dispositivo electrónico, también hará esta misma función, absorbiendo las energías electromagnéticas del aparato.
La más común de las turmalinas es la negra, pero también la hay en otros colores, que le otorgan propiedades específicas. Esto se debe a que las turmalinas son un grupo de cristales mixtos. Al estar compuesta por diversos minerales, sus tonalidades dependen de las combinaciones que se den de forma natural.
La turmalina es una piedra preciosa muy valorada en el mundo de la cristalería y la espiritualidad, y como hemos explicado, conocida por sus propiedades energéticas y protectoras. Por todo ello, existen diferentes modos de incorporarla a nuestro día a día:
Es importante limpiar la turmalina regularmente para eliminar las energías negativas que pueda haber absorbido. Puedes hacerlo con agua corriente, humo de salvia o poniéndola junto a un grupo de cristales de cuarzo. Igualmente, es recomendable cargarla, para ello solo tienes que dejarla bajo la luz de la luna llena o en un lugar donde reciba luz solar indirecta para recargar su energía.
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