Es una de las artistas de más éxito de nuestro país, pero alcanzarlo y mantenerlo exige mucho esfuerzo. Chenoa lleva más de dos décadas en la cima haciendo vibrar al público en cada uno de sus conciertos, en los que se entrega hasta la extenuación. Sin embargo, para mantener ese ritmo es importante llevar un estilo de vida saludable y hacer deporte. Mucho. Así lo ha confesado en una entrevista que ha concedido a 'Vanity Fair' la cantante, que en los últimos años ha experimentado un importante cambio físico.
A sus 48 años, Chenoa está en plena forma. Estarlo es fundamental para poder ofrecer un show a la altura de lo que esperan sus fans y de lo que ella misma se exige. Y para ello va cuatro veces por semana al gimnasio. "Subir al escenario es una hora y media de cardio. Y de cuádriceps, qué voy en tacón. Tengo que tener bastante fuerza muscular, y esta vida exige disciplina, como si fuera una deportista de élite", ha contado la actriz, que hace unos meses, en la cena de nominados de LOS40 MUSIC AWARDS, hablaba además de la necesidad de mantenerse activa en esta etapa. "Voy tirando más a la palabra menopausia (que sí que existe, señoras, sí), pues es importante hacer la parte muscular".
Y por supuesto, el descanso es también clave para mantenerse en forma y llegar a los conciertos al 100% para darlo todo. Media hora de siesta es fundamental “para arrancar hasta la hora que tú quieras" y después de los conciertos, vuelta a casa (o al hotel) para recuperarse. "Como artista el rock lo tengo en dos vertientes: en filosofía, a la hora de actuar y darlo todo. Pero no en actitud: cuando termino mis conciertos me voy a dormir y se acabó, y la voz calladita porque tengo que hablar o cantar al día siguiente", ha contado la cantante, que ha asegurado que está volcada en su trabajo. "Soy un soldado de mi curro, y me siento responsable del trabajo de muchas horas de gente que no se ve. Soy muy empática con eso", ha terminado diciendo.
Y si en algún momento fallan las fuerzas, Chenoa recurre a los suyos. Tan solo pensar en ellos le da la energía suficiente para seguir y enfrentarse a todo lo que se le ponga por delante. Su familia es su motor. "Cada año la adoro más. Cuando estoy agotada, pienso en mi sobrina o mi sobrino o en mis padres, y en lo mucho que se han esforzado ellos. El que ha trabajado mucho sabe que lo que estoy viviendo ahora es un regalo. Y que esto viene un rato, y luego se va", ha terminado diciendo la cantante.