Estar a régimen y quedar con los amigos en una terraza, en un restaurante o en un chiringuito sí es compatible. Hay muchas propuestas posibles sobre qué beber en un bar si estás a dieta. Socializar implica compartir momentos con los tuyos y no tiene porque estar ligado a beber ciertas bebidas alcohólicas acompañadas muchas de ellas de refrescos azucarados.
El alcohol no aporta nada bueno para el organismo y se compone de calorías que engordan, y para colmo están vacías de nutrientes. En cuanto a los refrescos son una bomba de azúcar añadido que se transforma en grasa. Los light tampoco son aconsejables debido a los ingredientes químicos y los edulcorantes que incorporan.
Además, en verano con estas temperaturas tan altas aumenta la sudoración con la consiguiente pérdida de líquidos y de sales minerales. Esto implica la necesidad de beber más.
Hemos hecho una recopilación de 6 bebidas permitidas cuando se está a régimen que son las más habituales de aquellos que han apostado por un estilo de vida saludable. En muy poco tiempo el organismo lo agradece y se perciben cambios realmente positivos a todos los niveles.
Los médicos recomiendan beber un mínimo de un litro y medio o dos de agua al día e incrementar esa cantidad en las épocas de mayor calor. En realidad, el agua es la reina para apaciguar la sed. Así que, en un bar, lo mejor es pedir agua primero y después cualquier otra bebida de las que proponemos a continuación. Recuerda que las aguas con sabores incluyen azúcares o edulcorantes añadidos con lo cual no son recomendables. Una opción es acompañar el agua con mucho hielo, unas rodajas de limón y unas hojas de menta; resulta aún más refrescante.
El agua carbonatada es agua al que se le ha añadido ácido carbónico. Como es inestable, se descompone fácilmente en agua y dióxido de carbono, el cual sale en forma de burbujas cuando la bebida se despresuriza. Al igual que el agua sin más quita la sed y además ayuda a hacer la digestión después de una comida pesada. Con hielo y limón también gusta muchísimo.
El té es una de las infusiones que más recomiendan cuando se hace dieta ya que tiene propiedades antioxidantes, sobre todo el verde y más aún el té blanco. Otra característica es que es drenante. Favorece la eliminación de líquidos gracias a su contenido en teína y cafeína, además de que activa el metabolismo y por tanto el consumo de calorías. En cuanto al té verde y al té rojo son dos opciones muy recomendables para las personas con hipertensión y con episodios de ansiedad. La condición es acostumbrarse poco a poco a su sabor sin añadir azúcar ni edulcorante.
Como sucede con el té tampoco se le tiene que añadir azúcar o edulcorante porque ya se rompería la dieta. La manzanilla, la cola de caballo, el poleo menta, el rooibos con múltiples sabores… son opciones varias para tomar en una terraza. Lo conveniente es prepararlas con agua hirviendo, dejarlas infusionar de tres a cinco minutos y degustar templadas o con hielo y un toque de sabor. Se les puede añadir una nube de leche, una rodaja de limón o de naranja o incluso vainilla.
Con el zumo de unos cuatro limones, un litro de agua, hielos en abundancia, una cucharada de miel y jengibre en polvo resulta una limonada refrescante y exquisita.
La cerveza 0% se permite consumirla cuando es de forma ocasional. Por una parte, no contiene alcohol y, por otra, supone un aporte calórico menor que una cerveza rubia convencional. Según los fabricantes, la 0% es una buena opción ya que es rica en proteínas, vitaminas, minerales, antioxidantes, fibra, calcio y potasio.
En muchos establecimientos tienen la costumbre de preparar cócteles, zumos o batidos a base de frutas. Son muy ricos de sabor, sin embargo, la fruta conviene consumirla entera porque al triturarla o exprimirla se elimina la pulpa y la fibra de modo que el organismo lo procesa como un azúcar de metabolización rápida. La consecuencia es que casi todas sus propiedades se pierden por el camino. También se puede solicitar que te preparen la fruta del cóctel o del zumo en una apetitosa y llamativa brocheta. Seguro que tus compañeros de mesa quieren otra.