Cuando ha pasado un mes desde que diera a luz a Gia, su segunda hija, Violeta Mangriñán ha vuelto al trabajo. Como siempre han comentado muchas influencers que también han sido madres, su profesión no tiene agenda ni horarios, por lo que para ellas, a veces, la baja de maternidad no existe. Con la llegada de su primogénita, Gala, la creadora de contenidos valenciana también se sinceró diciendo que, aunque había pasado muy poco desde que diera a luz, tenía que seguir trabajando por el bienestar de la familia que estaba formando junto a Fabbio Colloricchio, su pareja.
En este último año Mangriñán ha tenido que hacer frente a numerosos cambios. Además de su mudanza Madrid - Valencia (en donde se estrenaba como propietaria) - Madrid, a ello se le sumó el embarazo de su segunda hija, Gia. Tan solo unos meses de mudarse a su tierra natal, la influencer valenciana tomaba la decisión de regresar a la capital para desarrollar tanto su carrera profesional como la de su pareja (que trabaja como artista). Una decisión por la que fue duramente criticada y por la que tuvo que justificarse diciendo que era lo mejor para la familia que había formado.
Ya instalada en su nuevo ático de Madrid, en el que pasará una temporada hasta que se compre su propio hogar en la ciudad, y con un nuevo integrante en su familia (su hija Gia), la exconcursante de 'Mujeres, Hombres y Viceversa' ha retomado sus compromisos laborales y, aunque no se ha pronunciado en primera persona sobre cómo se siente ella tras haber dado a luz hace tan solo un mes, sí que lo ha mostrado con una conversación que ha hecho pública con Colloricchio.
"Y diles que su mamá las ama con locura", comienza la conversación de la influencer con su pareja, el cual no duda en animar a la madre de sus hijas a seguir con sus responsabilidades cuando está lejos de las pequeñas de la casa. "Dale gordi. No te sientas mal por trabajar", comienza diciendo. Además, el italiano le ha mandado un cosejo para cuando Mangriñán se sienta melancólica por separarse de sus hijas: "Cuando estás fuera de casa, dale duro. Te amamos. Y todos estamos orgullosos de ti".
Fiel a su estilo, la empresaria valenciana vuelto a mostrar la naturalidad que le caracteriza y ha desvelado en su cuenta personal las consecuencias de su segundo posparto. Con los ojos llorosos, la joven se ha sincerado tras una visita al médico. "He ido al médico después de dos días de dolor insoportable al ir al baño...", ha comenzado diciendo. "¿La gente quiere naturalidad en redes, ¿no? Pues nada, tengo almorranas, duele que te mueres. Otra de las maravillas del posparto", confesó.