A finales de los años ochenta, Mar Flores comenzó su trayectoria como modelo tras haber ganado un premio de la revista Elle. La de Usera comenzó pronto a ser una habitual de las pasarelas, convirtiéndose pronto en una de las modelos más populares del país, desfilando para grandes marcas, protagonizando portadas y campañas publicitarias. Una faceta a la que, con el tiempo, sumó la televisiva, como actriz, presentadora, colaboradora y concursante, que se ha extendido durante más de tres décadas, y la empresarial. Todo ello ha ocurrido mientras desarrollaba una vida muy intensa en lo personal, marcadas por sus relaciones sentimentales y sus cinco hijos. ¿Ha sido difícil para ella compaginarlo?
A la mencionada trayectoria profesional como modelo, presentadora y empresaria Mar ha sumado una vida privada que, en gran parte, ha sido plasmada y analizada en detalle por el papel cuché. Más allá de algunos romances que ya son historia del papel cuché patrio, de sus dos matrimonios con Carlo Costanzia di Costigliole y Javier Merino nació su descendencia, la que forman su primogénito, el actor Carlo Costanzia (de actualidad en los últimos meses en distintos frentes) y sus cuatro hijos pequeños, Mauro, Beltrán, Bruno y Darío, han sido siempre, en sus propias palabras, su prioridad.
De mujeres, trabajo y maternidad ha hablado recientemente la madrileña. Lo ha hecho esta mañana, durante la séptima edición del Elle Women's Day, en el que la mencionada publicación ha entregado los Elle Women Award. Con la perspectiva de la proximidad del Día de Mujer, que se celebra mañana 8 de marzo, la maniquí ha hablado con los compañeros de Europa Press sobre cómo ha logrado compaginar el éxito profesional con la educación y cuidados de cinco hijos. Todo ello, apenas unas horas después del cumpleaños de su hijo Beltrán, el tercero en cumplir dieciocho años.
Mar ha querido poner en valor el papel de las mujeres, reconociendo lo "potentes" que son a todos los niveles: "Podemos tener hijos, podemos trabajar, podemos conciliar trabajo con familia, creo que nos lo merecemos y se ve que vamos avanzando", ha comentado a los micrófonos del citado medio. Pese al balance positivo, la empresaria admite que sí ha tenido una experiencia vital más complicada por el hecho de ser mujer.
"He tenido que multiplicarme más, obviamente, he tenido que trabajar más, que pasar más horas sin dormir", se ha sincerado con respecto a la búsqueda de un equilibrio entre familia y trabajo. "Es más complicado, a los hombres no les pase eso, o conozco a muy pocos que les pase", ha admitido la presentadora.