Ion Aramendi y María Amores se han convertido en una de las parejas más consolidadas desde su paso por el altar en 2011. El presentador y su pareja, también periodista, han formado además una familia numerosa junto a sus tres hijos: Ion, Lucas y Marieta. Hoy, todos ellos celebran un día muy especial para el mediano de los hermanos.
El matrimonio acostumbra a compartir con sus seguidores imágenes de sus retoños en sus redes sociales. Ahora, con motivo del cumpleaños del segundo de sus hijos, María ha querido sacar a la luz unas fotografías capturadas tras su nacimiento.
En la primera de ellas, Amores aparece sonriente junto al recién nacido, que hoy sopla las 7 velas, desde la cama del hospital. Posteriormente, ha subido una nueva instantánea en la que esta vez, los protagonistas son Aramendi y el pequeño, que descansa sobre el regazo de su padre mientras ambos hacen el contacto ‘piel con piel’.
“Siete años de esta foto”, ha escrito en la historia temporal a la que siguen otras en las que define cómo fueron los primeros minutos de vida de Lucas: “Fue una cosa espontánea como él, un niño buenísimo, sanito, esa cara que parece que venía maquillado”.
La periodista, con motivo del aniversario del nacimiento de su primogénito, ha querido contar los detalles sobre cómo fue el parto: “Yo he tenido tres hijos y Lucas es el segundo, nació en 2017, y como decía Chiquito de la Calzada: nació después de los dolores”, ha comenzado explicando.
Aunque unos segundos después ha querido tranquilizar a sus seguidoras embarazadas, a quienes ha dicho que después del “trago viene la gloria”, ha afirmado que el de Lucas fue “de película”. Y es que tras haber ido a preparación al parto y decidir ponerse la epidural, María, que se encontraba en la semana 42 de gestación, no pudo optar a ella por la rapidez de los hechos ya que, después de acudir al centro sanitario con contracciones le dijeron que "volviera a casa" porque todavía faltaban unas horas.
Sin embargo, rompió aguas mientras estaba en el sofá de su domicilio, el cual ha confesado no haber tirado “por el cariño que le tienen por todo lo que le ha pasado”: “Lucas no nació en el coche de milagrito, nos saltamos rotondas y de todo porque se salía el bebé”.
Ahora, se ha sincerado sobre sus sentimientos tras el nacimiento de este: “Me lo dieron y estaba con un estado de shock que no me atrevía a cogerlo”, ha contado. A pesar del miedo, recuerda esa noche “como un enamoramiento”.