Lidia Bedman revela la decisión médica que ha tomado por su tercer hijo

A punto de convertirse en madre por tercera vez, Lidia Bedman ha tomado una importante decisión junto a su marido, el líder de VOX, Santiago Abascal. El matrimonio, que dará la bienvenida a su tercer hijo en las próximas semanas (previsiblemente a finales de este mes), ha querido proteger la salud futura de su bebé con una decisión que la influencer ha comunicado a través de sus redes sociales.

"Regalo para el bebé, para su futuro". Así ha empezado Lidia Bedman, que hace unos días contaba los inconvenientes que estaba sufriendo en las últimas semanas de embarazo, su charla con sus seguidores a los que ha explicado todos los detalles de lo que van a hacer su marido y ella cuando nazca su bebé. "Nos hemos decidido a invertir en salud para nuestra familia y para nuestro bebé que es conservar las células madre del cordón umbilical", ha contado la influencer, que también ha señalado que esperan que no sea necesario recurrir a ellas cuando el pequeño crezca. "Ojalá no tengamos que utilizarlo nunca".

"Es la primera vez que lo hago. Nos hemos decidido a conservarlas, ya se utilizan para el tratamiento de más de 80 enfermedades del sistema inmunitario y sanguíneo y también para medicina regenerativa", ha contado Bedman, que ha confesado que se arrepiente de no haberlo hecho con sus dos primeros hijos. "Esto es una decisión muy personal pero yo tenía esa espinita clavada. Yo no lo había hecho en mis anteriores partos, no lo había conservado con ninguno de mis otros hijos".

Además, la mujer de Santiago Abascal ha explicado a todos sus seguidores que el proceso de conservación es muy sencillo. "Me han mandado un kit que llevaré el día del parto y los médicos se encargan de todo", ha contado la creadora de contenido.

Lidia Bedman acude a revisión acompañada de su hijo Santi

En la recta final de su embarazo, Lidia Bedman ha acudido a una de sus últimas revisiones. Una revisión en la que todo ha ido fenomenal y a la que ha acudido muy bien acompañada. Su hijo Santi, de 9 años ha estado con ella y no ha perdido detalle sobre lo que ocurría en monitores. "Mi acompañante comprobando las constantes de su hermano", ha escrito junto a una tierna imagen en la que se ve al pequeño mirando con detalle la máquina que controlaba el latido del bebé que muy pronto le robará el puesto de pequeño en la familia y que le convertirá en hermano mayor.